Jennifer Garner y Ben Affleck anunciaron sus planes de divorcio hace un mes, y desde entonces, no se les había visto a todos unidos y sonrientes, como se les pidió ver el pasado sábado. Parece ser que ambos han dejado sus diferencias a un lado para poder disfrutar de un día en familia junto a sus tres hijos, Violet, Seraphina y Samuel.
La actriz parecía estar contenta mientras sostenía a su hijo en brazos, mientras su exmarido esbozaba una sonrisa mientras jugaba con sus dos pequeñas en Atlanta, donde la familia al completo se ha trasladado para apoyar a Jennifer, que está rodando su próxima película 'Miracles From Heaven'.
El actor, quien parecía un poco abatido, llevaba una gorra de beisbol puesta, y también quiso lucir su anillo de casado en la mano izquierda, después de que a principios de este mes fuese visto sin él, y por su parte la actriz tampoco lo ha hecho.La verdadera razón por la que continúan llevando sus anillos
Los actores continúan llevando sus anillos de casados, un gesto que según ha revelado una fuente próxima a la familia, es para ayudar a sus hijos a lidiar con el divorcio. También hicieron público hace unos días que habían adoptado un perrito, y puede ser una de las terapias que le han recomendado al actor para llevar mejor su separación.
La familia al completo s igue viviendo en el apartamento de Atlanta, después de que la pareja de actores anunciase que se divorciaba después de diez años de matrimonio. Una fuente cercana a la revista Us Weekly afirmó que "ambos se ponen sus caras felices y no muestran ningún signo de ira o frustración" y que " definitivamente juegan a ser una familia feliz delante de sus hijos ", añadió.