Pocos días después de la confirmación oficial de la ruptura entre Jason Derulo y Jordin Sparks, el cantante estadounidense ha tenido que salir al ruedo en defensa propia tras varias acusaciones de infidelidades y engaños durante una relación que ha durado tres años.
Derulo criticó además la actitud de los medios de comunicación tras difundir infundadas acusaciones y llamó a la responsabilidad de los medios. Por su parte Jordin Sparks parece llevar, como declaró Derulo 'con buena sangre' esta ruptura. La cantante y actriz tuiteó el pasado viernes; "No llores porque ya se acabó, sonríe porque sucedió".
Una ruptura a vistas
Y es que esta ruptura, a pesar de muchos de sus seguidores, era predecible. De ahí que una de las razones a las que ha apelado Derulo haya sido una rutina difícil, separados, y en la que era difícil mantener una relación estable y confortante.
El cantante de 25 años dio pistas de la situación en la que se encontraba el pasado 14 de septiembre. Un dilema e inestable relación que compartió con sus seguidores de Twitter: "El fútbol es lo único que me hace sonreír hoy. No tengo ganas de hacer nada, sólo tumbarme y andar por la nubes".