Desde que se diera a conocer su separación de Al Mana a principios de abril, la hermana de Michael Jackson apenas se había dejado ver en público. Una fuente cercana declaró a US Weekly que las diferencias culturales entre ambos afectaron demasiado a la relación. "Wissam quería una esposa que se apegara más a las tradiciones musulmanas", dijo el informante.
Después de cinco años de matrimonio, Janet Jackson decidió pedirle el divorcio a su marido al ver que apenas tenía libertad. "Se sentía como si no pudiera ser ella misma. No podía sentarse y ser lo que él quería que fuera. Janet quería más libertad, se sentía lejos de su familia y los extrañaba", continuó la fuente.
Rara vez se ha podido ver a la intérprete fuera de su casa de Londres ni tampoco ha recibido muchas visitas en este tiempo. Tras el nacimiento de Eissa Al Mana pasaba en casa casi todo el tiempo, pero en este último mes apenas ha residido allí. Sin embargo, el martes pasado fue visto llegar a la casa que compartía con su mujer con dos enormes bolsas de juguetes, para después abandonar la mansión con otra bolsa y una maleta.
Acuerdo prematrimonial
Jackson se casó en secreto con Al Mana, cuya fortuna vale más de 100 millones de dólares, a principios del año 2012. En enero de 2017 nació su primer y único hijo, Eissa Al Mana. En el acuerdo prematrimonial acordaron que, en caso de separación, un pago sustancial sólo se efectuaría si el matrimonio durara más de cinco años. Como esto ha sido así, la cantante ahora tiene derecho a recibir una parte de la fortuna de su expareja.