Según informa Page Six, la cantante estaba muy cansada de ciertos comportamientos de su marido, por lo que habría decidido poner punto final a la situación cortando de forma tajante.
"Él se volvió muy controlador durante el embarazo y ella le permitió intervenir en su apariencia e incluso la forma en que realizaba sus conciertos", ha revelado una fuente a dicho medio, explicando que le prohibió vestirse de cierta manera durante su tour de 2014.
Janet Jackson ha dicho basta
Por tanto parece que las cosas entre ellos no marchaban como deberían desde hace mucho tiempo, pero ha sido en los últimos meses cuando se ha agravado. Asimismo también apuntan al hecho de que el multimillonario obligó a la cantante a vivir en Londres bajo estrictas normas musulmanas que incluía no amamantar nunca en público a su bebé.