La actriz y el magnate musical han decidido poner punto final a su relación tras 8 años de amor.
2017 no ha empezado con buen pie para Jane Fonda. Según ha informado el portal de noticias Page Six, la veterana actriz y su pareja, Richard Perry, han decidido terminar la relación que les unía. Ha sido Perry quien ha dado la noticia, asegurando además a pesar de la separación los dos se encuentran muy felices y en un buen momento.
"No es una ruptura, tan solo es un cambio de dirección en nuestras vidas. No me gusta decir que la relación se ha acabado porque no es así. Sin duda, somos muy buenos amigos. Hacemos cosas juntos y nos preocupamos el uno por el otro" revelaba el hombre de 74 años. Jane Fonda y Richard Perry comenzaron su relación en 2009, pero nunca llegaron a casarse. La actriz había confirmado en distintas entrevistas lo contenta y lo ilusionada que estaba con su nueva pareja: "Nunca antes había conocido la verdadera intimidad con un hombre. Pero ha sucedido ahora con Richard. Me siento totalmente segura con él". La noticia de la que ya se han hecho eco los principales medios, no ha sorprendido en absoluto. Los rumores de una ruptura se dispararon cuando saltó la noticia de la venta de la mansión que compartían en Beverly Hills. La pareja compró la casa en 2012 por 7 millones de dólares y ahora la ponen en el mercado por 13 millones. Según informó Forbes, la morada cuenta con cuatro dormitorios, un ascensor de cristal, seis cuartos de baño, una cocina, un gimnasio y unas impresionantes vistas a la ciudad de Los Ángeles.
Una mujer reivindicativa
En la entrevista concedida a Page Six, el magnate de 74 años ha querido mostrar todo el cariño que siente hacia su expareja resaltando el espíritu activista que inunda a la actriz. "Ella misma se ha dedicado al nuevo activismo, definitivamente sentimos gran amor por los demás" recalcaba el magnate de la música. Jane Fonda ha sido uno de los rostros conocidos en las marchas a favor de las mujeres que se produjeron el 21 de enero en distintas ciudades de Estados Unidos.
No es la única ocasión en la que se le ha podido ver apoyando una causa de estas características. La actriz también se manifestó en 1972 contra la Guerra de Vietnam en la que recibió el apodo de 'Hanoi Jane' al posar sentada encima del cañón antiaéreo de la ciudad de Hanoi.