Jada Pinkett acostumbraba a llevar el pelo muy corto, hasta que en el verano de 2021 decidió raparse la cabeza. Ahora, ha querido visibilizar el problema por el que habría decidido decir adiós a su melena. En 2018, ya comentó en 'Red Table Talk', el programa de entrevistas que presenta en Facebook que estaba perdiendo grandes cantidades de pelo y contó que estaba acudiendo a especialistas en busca de ayuda.
Tras someterse a un gran número de pruebas y muchas visitas a especialistas médicos, Jada Pinkett recibió el diagnóstico de un trastorno autoinmune de alopecia, un problema que ataca a los folículos pilosos y causa la perdida del cabello. Una conversación que nunca ha sido fácil para ella, que poco a poco ha aprendido a aceptarse y vivir con este trastorno que afecta a millones de personas en el mundo.
Temblaba de miedo
"Un día estaba en la ducha y de repente me di cuenta de que tenía mechones de pelo en mis manos. Solo podía pensar ¡Dios mío, me estoy quedando calva! Aquello me dejó temblando de miedo", recordaba la actriz, que para ocultar esta perdida de cabello solía llevar turbantes y otros accesorios, hasta que este verano decidió aceptar su nueva imagen y mostró su cabeza rapada sin ningún tipo de reparo.
"He estado luchando contra la alopecia hasta que un día, mirad esta línea de aquí -decía mientras señalaba una parte de su cabeza en la que ya no le crece el pelo-. Apareció así y va a ser un poco difícil de ocultar. Así que pensé en compartirlo para que no hicieran preguntas. En este punto solo puedo reírme", aseguraba Pinkett en el programa de Facebook que presenta.
"Voy a cortarme todo el pelo hasta dejar ver el cuero cabelludo para que nadie se piense que me he sometido a una cirugía cerebral, o algo así. Esta alopecia y yo seremos amigas... ¡y ya está!", aseguraba de forma implacable y desprendida de complejos. También con gran sentido del humor aseguró que se haría una pequeña corona con diamantes de imitación para ocultar la zona más afectada por la pérdida de cabello.
