EN MADRID

Jacobo Fitz-James Stuart y Fernando Martínez de Irujo regresan al Palacio de Liria tras el funeral de la Duquesa de Alba

Los hijos de Doña Cayetana han dejado Sevilla y han regresado a su vida en Madrid. El Conde de Siruela volverá a Vilaür, donde vive junto a su mujer Inka Martí.

Guillermo Álvarez 25 Noviembre 2014 en Bekia

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El pasado 20 de noviembre falleció la XVIII Duquesa de Alba en el Palacio de las Dueñas de Sevilla, donde vivía junto a su marido, Alfonso Díez. Hasta allí habían ido llegando sus seis hijos y ocho de sus nueve nietos para despedirse de Doña Cayetana antes del fatal desenlace.

Esa misma tarde todos velaron a Doña Cayetana en la capilla ardiente que se instaló en el Ayuntamiento de Sevilla, lugar por el que pasaron más de 80.000 personas para decir adiós a la Duquesa de Alba. Al día siguiente se celebró el multitudinario funeral en la Catedral de Sevilla, con la asistencia de la Infanta Elena como representante del Rey de España.

En la tarde del viernes, los Fitz-James Stuart depositaron las cenizas de Doña Cayetana en la iglesia del Cristo de los Gitanos, donde reposarán para siempre en su totalidad, ya que finalmente no habrá traslado al panteón de Loeches.

De vuelta a Liria

De momento, los Alba han vuelto a sus vidas y se han desplazado a Madrid. Eugenia Martínez de Irujo ha sido vista paseando por las calles de la capital con su hija Cayetana. Sus hermanos varones salvo el Duque de Huéscar y el Duque de Arjona han sido vistos en el Palacio de Liria, residencia de la Casa de Alba en Madrid.

Frente a la puerta principal del palacio se encontraba Jacobo Fitz-James Stuart, que fue fotografiado mientras charlaba con una persona de su confianza. El Conde de Siruela reside habitualmente junto a su mujer Inka Martí en una masía en la localidad gerundense de Vilaür, donde volverá en cuanto pasen unos días.

Quien también fue visto en el Palacio de Liria y sus inmediaciones fue Fernando Martínez de Irujo, cuarto de los seis hijos de la Duquesa de Alba, que tras el funeral y los primeros días de duelo en Sevilla, ha regresado a su vida en Madrid y en Liria, punto de encuentro de los hermanos Alba y propiedad del primogénito, Carlos Fitz-James Stuart.

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