Antes de entrar a la gala, Tamara Falcó hablaba orgullosa de su estilo y de cómo su madre había influido en ella. "Imaginaros el ejemplo que he tenido en casa, es maravilloso", decía. Además admitía que le encanta pasar tiempo con su madre. "Nos encanta, de hecho salimos a cenar de vez en cuando juntas, pero nos encanta estar en casa mano a mano", afirmaba.
"Al final es la conexión esa tan especial que tienen las hijas con sus madres", asumía. Ante estas palabras su madre no podía evitar acercarse sonriente a su hija y hablar también de la mucha complicidad que tienen ambas. Pero lo mejor venía cuando Isabel Preysler tomaba el relevo con la prensa y hablaba de su Íñigo Onieva, que también acompañaba a su esposa y a su suegra.
Una relación muy estrecha
"Me encanta", decía sonriente. "Se come fenomenal", añadía orgullosa por el trabajo que está llevando a cabo su yerno. Incluso se atrevía a opinar del precio que tenía en el restaurante. "Yo creo que es más bien barato, está bien de precio", aseguraba. No obstante, admitía que no era la más indicada para hablar. "No me preguntéis a mí, porque yo hago publicidad siempre", decía entre risas.
Sin duda, fue una noche muy especial en la que los tres disfrutaron mucho. También se pudo ver a un Íñigo Onieva de lo más enamorado, que mostraba a través de sus redes sociales todo lo que sentía por Tamara Falco. "Orgulloso de mi maravillosa mujer. Me inspiras cada día", confesaba.