La tonadillera hace frente a un nuevo drama judicial que, junto con la denegación de la visa, hacen peligrar su gira por Estados Unidos.
Isabel Pantoja se enfrenta a un nuevo problema judicial. A poco menos de mes y medio para que la tonadillera arranque su gira por América, una demanda podría jugarle una mala pasada. El pasado 29 de septiembre de 2022, la artista recibió un burofax de parte de una empresaria Marbella advirtiendo lo siguiente: "Le comunico que este despacho profesional ha sido contratado a fin de iniciar acciones legales por incumplimiento profesional realizado a mi representada". Fue Luis Rollán el que adelantaba esta noticia en el programa 'Fiesta'.
Al parecer, Isabel Pantoja conoció en 2019 a una empresaria de Marbella, que fue la encargada de organizarle el sonado concierto en el Wizink Center de Madrid escasos días antes del estallido de la pandemia. Esta misma empresaria se puso en contacto con una productora estadounidense para ofrecerle la posibilidad de llevar a cabo la producción de los conciertos de la tonadillera en América. Esta empresaria habría cerrado un contrato de exclusividad en el que se refleja que esa productora ejercerá, durante los próximos cinco años, de empresarios de Isabel Pantoja en suelo americano.A partir de ese momento, según la profesional que envía el burofax, se realiza un calendario de fechas y ciudades, pero el proyecto se detiene ante la negativa del gobierno estadounidense para la concesión de la visa en 2020. Sin embargo, el pasado verano de 2021, se anuncia una gira de la tonadillera por América en noviembre de 2022. La sorpresa llega cuando, la producción de estas gira la lleva una empresa española a la que Agustín Pantoja, hermano y manager de Isabel, se lo habría encargado. Eduardo Guervos, es el elegido para llevar la gira de la Pantoja en América.
Por esta razón, la empresa de la empresaria marbellí ha decidido demandar a Isabel Pantoja, con quien asegura que realizaron un acuerdo verbal, respaldado por conversaciones y audios donde es la propia cantante la que da el visto bueno al proyecto. La demanda por incumplimiento de contrato también se extendería a la empresa americana. Embrollos contractuales a parte, la tonadillera tiene una dificultad añadida para poder entrar en Estados Unidos, a la artista aún no le conceden el visado de trabajo, necesario para poder llevar a cabo su gira.No todo es malo
A pesar de este enorme varapalo, en el ámbito familiar no es todo tan malo para la tonadillera. Su hijo, Kiko Rivera, ha confesado recientemente que está más cerca de su madre, intentando solucionar sus diferencias y que, incluso, está dispuesto a renunciar a la herencia de su padre, Paquirri. No está siendo igual para el DJ, que tiene un gran frente abierto en la relación con su hermana, Isa Pantoja. Después de un ataque por parte de él, la hermana menor del DJ ha tachado a su hermano de 'ser despreciable' y ha dicho que, muy probablemente, tome acciones legales.