La joven ha concedido una entrevista para hablar de las polémicas familiares, desde el enfrentamiento entre su madre y hermano hasta la relación de su abuela con su nieto.
Sin casi darse cuenta Isabel Pantoja ha visto cómo el conflicto entre su madre y su hermano por la herencia de Francisco Rivera ha acabado salpicándole de frente y pasándole factura a la persona que más quiere, su hijo Alberto, a quien su abuela no ve desde hace casi un año. La joven ha concedido una exclusiva a Lecturas para hablar de todas las polémicas familiares y ha confesado sentirse tranquila a pesar del enfrentamiento entre su madre y su hermano.
Lo que le duele a la influencer es ver cómo su familia está totalmente resquebrajada. Las últimas imágenes que se han visto de la tonadillera aferrada al brazo de su hermano Agustín a la llegada de los Juzgados no pasaron desapercibidas para la propia Isa Pantoja, quien ha reconocido verla mal físicamente: "Ella siempre intenta mantener su semblante". Asimismo, la joven intentaba ser empática con la cantante y explicó: "A veces me pongo a pensar en lo que debe estar pensando. Si me preguntaran en qué mente me gustaría estar, diría que en la de ella, saber qué piensa", apuntó. Aunque prefiere no mojarse y mantenerse al margen, lo que es un hecho es que la hija de la cantante ha escuchado la versión del Dj y entiende sus motivos, así lo ha confesado en la entrevista. "Hablando con él le dije que si es como lo cuenta, pues sí, tiene razón. Lo que pasa es que a mí no me gustó lo de citarla en el juzgado, aunque iba como testigo. Mi madre no ha dado ningún tipo de explicación y, a falta de eso, ¿a quién entiendo? Pues a mi hermano. Y lo que le ha puesto a mi tío, por lo que él me ha contado, pues claro que tiene razón", ha dicho muy contundente.
Pero la relación entre madre e hija no ha sido fácil después de que la colaboradora de 'El programa de Ana Rosa' no haya sido capaz de posicionarse del lado de su madre, algo que le ha pasado factura a la familia. Igualmente, más allá de eso no entiende que su hijo tenga que pagar los platos rotos cuando el problema es con su hermano: "Mi hijo ve que no vamos a Cantora, cuando él iba como mínimo dos veces a la semana. Me ve triste y me pregunta por su abuela", ha reprochado indignada la exsuperviviente. "No me gusta que mi madre le haya dicho a mi hijo que irá a verlo, algo que no va a cumplir", sentenció. No se ha olvidado
Muy emocionada explicaba que su madre es de enfadarse con todo el mundo: "Se enfada con todos y también conmigo. Tengo la conciencia tranquila y por eso no me afecta en mi día a día, no es como otras veces que había cosas que sí. No quiero ponerme a llorar aquí", expresó con mucha pena. No obstante, mandó una lanza a favor de su madre diciendo que por mucho dolor que sienta no es capaz de borrar de un plumazo el amor de un hijo. "Qué madre se olvida de su hijo", dijo firmemente.