Alrededor de una semana después de que los medios de comunicación de todo el mundo anunciaran el final de la relación entre Irina Shayk y Bradley Cooper, la modelo ha hecho su primera aparición oficial en el salón internacional de la moda Pitti Immagine Uomo, celebrado en la ciudad italiana de Florencia. Ajena a todo el revuelo que ha generado la noticia, la modelo parece haberse centrado de lleno en su profesión para poder pasar página lo antes posible.
Por primera vez desde hace 4 años, la rusa se subió a una pasarela estando soltera y la maniquí lo hizo desfilando deslumbrante y derrochando glamour con su doble aparición con dos conjuntos de estética muy sexy, lo cual es una característica habitual del trabajo de Roitfeld. El primero de los estilismos era un vestido de cuero negro con un precioso escote de palabra de honor junto con unos largos guantes a juegos y unos panties negros semitransparentes. El segundo de ellos, pero no menos impresionante, fue un traje sastre a rayas compuesto por una chaqueta y una falda a juego con una gran abertura que dejaba ver la liga que sujetaba las medias.
Antes de desfilar en Italia, la modelo había pasado unos días en Islandia para trabajar en una campaña publicitaria, aprovechando sus días allí también para relajarse un poco con unos amigos. Después de compartir con sus seguidores una imponente foto en bañador que dio rápidamente la vuelta al mundo, la modelo viajó directamente a Florencia para compartir pasarela con otras modelos internacionales como Gigi Hadid y Bella Hadid, Joan Smalls, Doutzen Kroes o Natasha Poly, que regresaba a la pasarela tras su maternidad.
Motivo de la ruptura
Según ha publicado la revista People, fuentes cercanas a la ahora empareja aseguran que "dado que Bradley e Irina siempre han sido muy discretos con su vida privada, pocos sabían que estaban teniendo problemas", pero que a estas alturas llevaban "vidas totalmente separadas". Los rumores de ruptura se dispararon a partir de la gran conexión que había tanto fuera como dentro de la pantalla entre el actor Bradley Cooper y la intérprete Lady Gaga tras grabar la premiada película 'Ha nacido una estrella'. Esta última incluso ha tenido que pedir respeto por Bradley Cooper e Irina Shayk a los internautas que señalaban a la cantante como motivo principal de la ruptura.