Por un lado, se encuentra la tonadillera y su retoño, que decidieron no acudir al evento por la batalla judicial que la cantante mantiene con el padre del bebé; y en el extremo opuesto se encuentran la madre del pequeño y la que fuera su niñera más fiel, Dulce Delapiedra. "Ha sido muy doloroso para Isabel que no acudieran ni su madre, ni sus sobrinos, ni su hermano. Para mí no tiene perdón de Dios lo que han hecho", dijo la canguro durante una entrevista en 'Sábado Deluxe'.
Parecía que dentro de esta guerra, la pareja de Paquirrín; Irene Rosales, se encontraba en territorio neutral, pero su asistencia al bautizo ha cabreado muchísimo a la matriarca. Durante su intervención en el espacio de Telecinco, Dulce aseguró que la tonadillera ha echado las cruces a su nuera y que su relación no es buena desde que decidió situarse de lado de Chabelita, añadiendo así más enemigos a la larga lista negra de Isabel Pantoja
El bautizo de la discordia
Según cuenta Semanas, Delapiedra ha revelado que Rosales y Paquirrín acabaron como el Rosario de la Aurora después de una fuerte pelea por acudir o no al sacramento de su sobrino: "La relación entre Irene Rosales e Isabel Pantoja madre no es buena, ella se posiciona en muchas cosas del lado de Isa y con su asistencia al bautizo dio la espalda tanto a Kiko como a la Pantoja. Irene ha expuesto en su círculo íntimo que Isabel Pantoja fue quien prohibió a Kiko ir al bautizo. El viernes hubo una discusión entre Kiko e Irene y al final ella decidió ir sola. Quería llevar a sus hijas, pero Kiko no se lo permitió".