La vida les ha puesto un nuevo bache en el camino, uno totalmente inesperado y bastante delicado. Kiko Rivera sufría un ictus la tarde del jueves 20 de octubre, lo que le llevó a tener que ingresar de urgencia en el hospital. El DJ comenzó a notar que tenía media cara paralizada y fueron corriendo al hospital más cercano pero le derivaron al Virgen del Rocío porque es donde contaban con una unidad de ictus.
Allí permaneció en observación sin recibir apenas visitas para evitar que sufriera sobresaltos y el sábado fue trasladado a planta donde ya sí puede recibir a sus seres queridos. La persona que está siendo incombustible, como siempre ha sucedido, es Irene Rosales, quien no se ha separado de su marido en ningún momento durante estos días. Está claro que ha sido un susto enorme para todos y la mujer de Kiko Rivera ha querido mandar un mensaje de agradecimiento a través de las redes sociales.
"Gracias de todo corazón por la cantidad de mensajes que me estáis mandando con mucho cariño, amor y energía de la buena para Kiko. Tanto él como yo os lo agradecemos muchísimo. Es imposible responder a tantos mensajes pero los voy leyendo poco a poco ", comenzaba diciendo Irene Rosales ante el aluvión de muestras cariño que están recibiendo por lo vivido.
Una nueva vida
Irene Rosales ha reflexionado sobre lo sucedido: " Ha sido un gran susto, pero tengo un marido que es fuerte. Esto nos va a servir para ver la vida de otra manera, para saber que la vida es YA y hay que saborearla de una bonita manera", decía sobre el tema con unas palabras que dejan claro que ahora toca vivir al máximo porque nunca sabes qué es lo que te puede pasar.
Por último, la que fuera colaboradora de televisión también ha hablado de la recuperación que queda y de cómo afrontan estos días: " Ahora queda tener paciencia para una recuperación total y descansar mucho que estos días están siendo agotadores. Os mandamos un besazo enorme ", concluye el mensaje. Mucho apoyo para todos y esperemos que todo vaya bien.