La exescolta de Irene Montero le ha demandado por un trato laboral "discriminatorio" debido a las actividades que le ordenaba realizar, muy lejanas a su supuesta función. Al parecer, la trabajadora denuncia que Montero le habría obligado "de manera recurrente" y fuera de su horario, a hacer recados tanto para ella como para sus amigos, hacer de "chófer de familiares invitados al domicilio o de transporte de envíos de familiares" o encargarse de la vivienda y la mecánica de los vehículos privados de la pareja, entre otras cosas, como apunta OK Diario.
Irene Montero portando a su hija en su llegada al debate electoralAsí, el medio cuenta que Montero le mandaba hacer tareas personales, tales como comprar "productos de parafarmacia y droguería para bebés" o "alimentación", llevarle la cena a casa o, incluso, "comprar comida para los perros". Además, también le pedía que comenzase antes su jornada laboral para "calentar el habitáculo del coche", que era utilizado por la número dos de la formación morada para sus distintos desplazamientos. Durante esos casi dos años que trabajó para la política y según su versión, tuvo que "hacer de chófer de la empleada doméstica y de la niñera" o "tareas de mantenimiento en varias propiedades", entre otras muchas cosas.
Demanda por despido nulo contra Podemos
Estas labores están expuestas en la demanda por despido nulo presentado por la mujer contra Podemos ante el Juzgado de lo Social número 3 de Madrid. La trabajadora exige su readmisión al considerar que se prescindieron sus servicios por sus quejas ante el "trato discriminatorio" recibido por Irene Montero en el tiempo que trabajó para ella.
Irene Montero y Pablo Iglesias durante una sesión parlamentariaAl parecer, todo comienza en 2016 cuando Podemos contrata a la empleada con la función de "escolta personal en exclusiva" de Pablo Iglesias, "tanto de la agenda oficial como de la personal". Tras un año trabajando con él, la demandante pasó al servicio de Irene Montero en 2017, momento en el que "las órdenes, directrices y trato dispensado por esta a la trabajadora" empezaron a "exceder con mucho de las normales", aquellas dirigidas hasta la fecha. Estos encargos no respetaban "los derechos básicos y condiciones" en una relación laboral, y se ejercían por encima "de la jornada legal, horario y turno asignados" y en horas nocturnas que no fueron pagadas.
Reasignada por quejas sobre su situación
Esta misma denunciante afirma que "por cuestiones personales, se impidió su descanso obligatorio entre jornada y jornada ", algo que provocó que tuviese que dormir "cuatro horas" antes de "hacer viajes de larga distancia conduciendo". Después de estos excesos, que nunca fueron abonados, la empleada se negó a "llevar a cabo las órdenes" que ejercían la Portavoz de Podemos en el Congreso y exigió, aunque sin éxito, que se regularizase su situación según el Convenio Colectivo.
Irene Montero durante una rueda de prensaA principios de 2019, en un grupo de la red social Telegram llamado 'Primos Lejanos' en el que se encuentran militantes del partido, la demandante se quejó de las condiciones laborales que estaba sufriendo. Este mensaje fue eliminado y acabó en manos de Montero, algo que hizo empeorar la situación, según adjunta la trabajadora. Para terminar, Podemos determinó reasignarla a "Doña Gloria Elizo" con la premisa de "motivaciones sin concreción alguna, ambiguas, indeterminadas y en absoluto objetivas".
