El accidente de Emiliano Sala y David Ibbotson fue debido a una pérdida del control por parte del piloto.
Emiliano Sala y su piloto David Ibbotson perdieron la vida el 21 de enero de 2019 en una avioneta que volaba rumbo a Cardiff. Asimismo, tras las numerosas investigaciones que se han llevado a cabo, el Gobierno del Reino Unido ha revelado que la aeronave volaba a una velocidad significativamente superior a la normal cuando el piloto perdió el control.
Asimismo, según el informe de los especialistas de la Air Accidents Investigation Branch se ha confirmado que "ni el piloto ni la aeronave tenían las licencias o permisos necesarios para operar comercialmente". Y es que, la pérdida de control se dio durante un giro manual "que probablemente se inició para recuperar las Condiciones Meteorológicas Visuales".Por otra parte, la avioneta sufrió una ruptura en vuelo "mientras el piloto maniobraba a una velocidad aerodinámica significativamente superior a su velocidad de maniobra de diseño". Además, la investigación concluyó con la detección de monóxido de carbono y declararon que "el piloto probablemente se vio afectado por el envenenamiento".
Además, el informe de la investigación dio detalles específicos sobre los factores que causaron el accidente: "A las 20:16 horas, probablemente mientras maniobraba para evitar el mal tiempo, el avión se perdió del radar y golpeó el mar a 22 millas náuticas al norte-noroeste de Guernsey".Condiciones mejorables
Finalmente, Crispin Orr, el inspector de la Subdivisión de Investigación de Accidentes Aéreos declaró: "Fue un accidente trágico con consecuencias fatales. Mientras publicamos nuestro informe final, nuestros pensamientos están con las familias del señor Sala e Ibbotson". También afirmó que estaban implantando nuevas medidas para que las condiciones de seguridad en los vuelos sean más efectivas.