Íñigo Onieva no tendrá un nuevo proyecto profesional después de su boda con Tamara Falcó, o al menos no el que se creía que se materializaría en enero de 2024. Al parecer se habría convertido en el fichaje del famoso Café Gijón, pero no será así y desde la misma empresa lo han desmentido a través de un comunicado.
Los propios dueños del establecimiento de Madrid los que han confirmado con estas palabras: "Quisiéramos desmentir rotundamente las mencionadas noticias y manifestar que es absolutamente falso que el Café Gijón se haya vendido a nadie", han anunciado, después de que también la revista Semana informara de que Onieva de momento no había firmado ningún contrato con ellos a pesar de lo que se había llegado a decir. Así que de esta manera no existe ningún tipo de relación entre él y el famoso café.
Por lo que se sabe, la dirección de este lugar pertenece a los hijos de Gregorio Escamilla tras su fallecimiento en 2019. "No hay nada firmado. No entienden de dónde salen estas informaciones o a quién o quiénes le pueden interesar que diga que Onieva es socio del Café Gijón", han comentado desde la empresa a la revista anteriormente mencionada.
Lo cierto es que en el futuro profesional del futuro marido de Tamara Falcó está en el aire, y más después de que el mes de mayo se marchara del grupo empresarial al que llevaba unido durante años. De esta manera deja de trabajar para Tatel y Totó, entre otros lugares, donde trabajaba principalmente como relaciones públicas.
Volcado en los preparativos de su boda
Entre tanto, en este punto de su vida se encuentra volcado a la organización de su boda con Tamara Falcó, que se celebrará el 8 de julio en una ceremonia a la que asistirán unas 400 personas, y continuará con una increíble fiesta en la Finca El Rincón, que heredó la Marquesa de Griñón de su padre cuando falleció en 2020.