No ha sido una relación precisamente idílica. Desde que comenzaron a salir, las idas y venidas han sido frecuentes en el romance entre Alberto Isla y Chabelita Pantoja, pero parece que ahora la pareja ha decidido tomar caminos diferentes para siempre. Los motivos de este nuevo adiós no estaban claros del todo, pero por fin Paloma García-Pelayo ha arrojado algo más de luz en 'El programa de Verano'.
La periodista ha tenido acceso a unos mensajes que Isla intercambió con un amigo de confianza, en los que le explicaba cuáles eran las circunstancias que habían suscitado que él y la hija de Isabel Pantoja pusieran punto y final a su amorío. Durante la conversación, el gaditano le comenta a su confidente que las sospechas de que su exnovia le hubiera podido ser infiel fueron solo la gota que colmó un vaso que ya estaba muy lleno. Al parecer, la exsuperviviente era muy dejada y se levantaba tarde para pasarse el día tirada en el sofá mientras miraba telenovelas, algo que al padre de su hijo no le hacía nada de gracia.
Alberto Isla y Chabelita Pantoja en la Feria de SanlúcarAdemás, Isla asegura que apenas intimaban y que cuando él iba a darle algún beso o a sorprenderla con un gesto de cariño, ella respondía poniendo mala cara y alejándose, argumentando que es así de fría porque su madre no le dio cariño de pequeña. Lejos de intentar modificar esta actitud, Chabelita avisaba a su entonces novio de que no tenía intención ninguna de cambiar.
No le importa el engaño
Del mismo modo, Alberto Isla casi no le dio importancia a los rumores que apuntaban que Chabelita le habría sido infiel con Tony en una caseta durante la feria de Jerez, sino que se muestra más afectado por las condiciones en las que se encontró su hogar al regresar de Honduras tras su paso por 'Supervivientes': " Cuando llegué, además de todo el circo, me encontré con que en mi casa no tenía agua ni luz ", algo que terminó de sacar de quicio a un hombre que ya estaba muy quemado.
Alberto Isla en el bautizo de su hijoEn aquel momento, la relación estaba tan rota que ni siquiera pudieron esperar al bautizo de su hijo para despedirse. De hecho, Sandra Aladro ya confirmó en su día que cuando se produjo el sacramento, los padres del niño ya estaban separados. "Cada uno íbamos a nuestro rollo porque no estábamos juntos desde hace unos días, pero claro, había un reportaje y no podíamos dar la nota", reconoce el propio Isla durante la conversación con su amigo.
Sobre los comentarios de que estuvo tonteando con una chica mientras se celebraba el evento, Isla se defiende alegando que "estuve todo el tiempo con mis amigos, bajo ningún concepto tonteé con nadie porque los que estaban eran mi familia. Fue muy tenso por la situación. Por lo demás, la gente salió contentísima". En el aire queda cual de los dos tortolitos decidió cortar por lo sano y poner fin a la relación, pero por lo que cuenta el gaditano parece que fue a él al primero al que se le agotó la paciencia.
