Juntos han formado una familia muy feliz y cuya vida gira alrededor de su pequeña, una niña de gran carácter, que no se asustó al caerse al suelo, pues se levantó y siguió correteando por las calles de Madrid, ante la atenta mirada de su madre, que iba charlando junto a una amiga, mientras empujaba el carrito del coche.
Inés Domecq demostró ser toda una madraza, pendiente de su hija, a la que llevaba muy abrigada para que no cogiese frío en ese día de invierno. La joven lució una gran elegancia y sencillez, con una chaqueta negra de cuero atada a la cintura y unos ajustados pantalones vaqueros.
La nueva generación de la Casa de Alba
Colaboradora de una revista, Inés está licenciada en Marketing y Publicidad, y compagina su gran profesionalidad en el medio en el que trabaja con su papel de madre de Sol y esposa de Javier Martínez de Irujo, hijo pequeño de Alfonso Martínez de Irujo, duque de Aliaga, uno de los miembros menos conocidos de la familia de Alba, pues siempre se ha mantenido en un discreto segundo plano.
La pareja contrajo matrimonio en una ceremonia religiosa que tuvo lugar en el Convento de Santo Domingo, de Jerez, y en la que estuvo la familia Alba al completo, así como otros miembros de la vida social española.
En ese enlace fue comentado el percance que sufrió Doña Cayetana cuando se atragantó con un zumo, y es que por aquel entonces la Duquesa se encontraba postrada en una silla de ruedas, imagen que contrasta con el aspecto de hoy en día.