A pesar de los difíciles momentos que han vivido tanto Iker Casillas como Sara Carbonero en el año 2019, han vuelto a demostrar que no hay nada que les nuble sus días y que cualquier momento es bueno para rodearse de la familia o de buenas amistades. El matrimonio ha disfrutado de Oporto, la ciudad en la que viven y que tanto les gusta, al aire libre, de terraceo y con una sonrisa de oreja a oreja.
Ha sido el portero el que se ha hecho eco de su fin de semana a través de sus redes sociales publicando una imagen en blanco y negro con un buen grupo de amigos. Noches casi casi de verano, en blanco y negro... Bla, bla. Bla...", ha escrito en su cuenta de Instagram. Él aparece sentado al lado de su mujer muy feliz, y es que cualquier momento es bueno para sonreír.
Su felicidad ha sido motivo de alegría de los seguidores de la pareja, y es que ante la adversidad han conseguido estar más unidos que nunca. Mientras que Iker Casillas se recupera poco a poco de su infarto de miocardio -lo sufrió el 1 e mayo de 2019-, ella está en tratamiento tras haber sido intervenida el 21 de mayo de un cáncer de ovario. "¡ Qué gustazo veros así !", ha escrito uno de sus seguidores, y otros decían: "Disfrutad de la vida, que os lo merecéis".
Lo mejor es estos momentos para ambos es mirar de cara al futuro con mucho optimismo, aunque el portero ha preferido ser cauto en sus decisiones de cara a su carrera profesional. Esto es un proceso rápido en lo físico, pero lento en la toma de decisiones. De aquí a marzo el doctor vera cómo es la evolución y si hay algún riesgo el primero que no lo tomará seré yo. Si se pueden dar bien las cosas decidiremos en una mesa. Ahora lo que hay que hacer es recuperarse y ver el camino que coge mi cuerpo", dijo él mismo sobre su salud.
Al mal tiempo...
Mientras tanto, ella también ha dado cada nuevo paso con una sonrisa, y por eso una de las reflexiones que ha compartido en su redes sociales decía así: "Siento a mi gente más cerca que nunca y me estoy riendo, creo que como jamás antes lo había hecho. Porque la vida es así, un cambio constante, un regalo precioso pero envenenado".