Ser un personaje famoso no exime de tener problemas con Hacienda, es más, incluso la Agencia Tributaria mira con lupa sus ingresos, ya que en caso de no tener sus cuentas claras, sus casos sirven de escarmiento por el escarnio que supone defraudar.
No se buscaba el fraude
Según informa el citado medio, el portero del Real Madrid ha tenido que pagar recientemente en torno a dos millones de euros al erario público, un dinero que tuvo que ser abonado por" las diferencias sobre el modo de aplicar el tratamiento fiscal a determinados ingresos".
Con estos pagos, Iker Casillas se habría puesto al día con sus obligaciones con la Agencia Tributaria, y estaría libre de toda sospecha, además, en su caso lo que no se pagó no tuvo ánimo de fraude, por lo que no se consideró delito.
Para dejar cerrado el tema, La Vanguardia cita a fuentes cercanas al portero de la Selección Española para señalar que tanto Iker Casillas como su sociedad, Ikerka, están totalmente al día en sus pagos con Hacienda.