Galería: La Familia Real Jordana en imágenes
No hay duda de que el fútbol es el deporte más importante del mundo. En algunos países como Argentina, España, Italia o Inglaterra es el rey, mientras que en otros países es secundario, pero en conjunto gana por goleada a los demás. Sin embargo, muchos famosos y sobre todo las clases altas, realeza y aristocracia prefieren deportes más elitistas, como la hípica.
Dentro del mundo empresarial destaca Marta Ortega, hija de Amancio Ortega y heredera del Imperio Inditex. La joven es una consumada amazona que tan solo abandonó la competición cuando se quedó embarazada de su hijo Amancio, un bebé nacido de su matrimonio con Sergio Álvarez, que también es jinete.
Su amiga Athina Onassis también se dedica a la hípica profesional, y compite por todo el mundo acompañada por su marido, Doda Miranda, que también es jinete. La joven heredó una fortuna de su abuelo, el armador griego Aristóteles Onassis.
Cayetano Martínez de Irujo, el jinete aristócrata
Dentro de la alta sociedad también destacan José Bono Rodríguez, hijo del expresidente del Congreso José Bono, y Carolina Aresu, sobrina de Ana Obregón, que han elegido la hípica profesional como forma de ganarse la vida.
Cayetano Martínez de Irujo no solo se encarga de los negocios de la Casa de Alba, sino que es jinete. El Conde de Salvatierra hizo de su afición una profesión, para lo cual tuvo que irse de España una temporada. Su propia madre, la Duquesa de Alba, no entendía que su hijo hubiera elegido esa opción, debido a que lo consideraba más un hobby que un trabajo, aunque finalmente dio su brazo a torcer y apoya desde entonces al quinto de sus seis hijos.
Jessica Springsteen, hija del cantante Bruce Springsteen, no tiene nada que envidiar a los citados famosos que se dedican a la hípica, que tendrán que ir haciendo hueco a otra celebrity a la que no se le da nada mal la hípica, Destry Spielberg, hija de Steven Spielberg, que a sus 17 años promete.
La relación entre hípica y realeza
La realeza es una habitual en las competiciones hípicas. En España la Infanta Elena compite de forma ocasional en pruebas. No es su actividad principal, ya que la Duquesa de Lugo es profesora de inglés, trabaja para la Fundación Mapfre y participa en actos oficiales como miembro de la Familia Real Española. Con todo ello, siempre saca tiempo para dedicar tiempo a un deporte al que profesa un amor que heredó de su abuela, la Condesa de Barcelona.
La madre del Rey Don Juan Carlos también inoculó la pasión por la equitación a su hija mayor, la Infanta Pilar, que siente una especial devoción por los caballos y la práctica de este deporte y que ha ejercido como presidenta de la Federación Hípica Internacional. Victoria de Marichalar, hija de la Infanta Elena, también disfruta montando a caballo.
En la realeza internacional hay otros ejemplos de amazonas. Una de las más destacadas es Zara Phillips. La hija de la Princesa Ana de Inglaterra y nieta de la Reina Isabel II y del Duque de Edimburgo forma parte del Equipo Olímpico Británico y consiguió una medalla de Bronce en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, un gran honor para la Familia Real. Solo ha dejado la competición debido a su embarazo.
En la misma tesitura se encuentra Carlota Casiraghi, una consumada amazona que solo abandonó la equitación a causa de su estado de gestación. La hija de la Princesa Carolina de Mónaco destaca principalmente en las competiciones de saltos, y además es muy amiga de las citadas amazonas Marta Ortega y Athina Onassis.
Finalmente se encuentran la Princesa Haya de Jordania, presidenta de la Federación Hípica Internacional desde 2006 en sustitución de la Infanta Pilar de España. La hija del fallecido Rey Hussein I de Jordania ha sido deportista olímpica. Lo mismo ha ocurrido con la Princesa Natalia zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg, sobrina de la Reina Margarita II, que compite con el Equipo Olímpico de Dinamarca.