La mediana de las Kardashian se cambió dos veces de modelito para celebrar la fiesta más terrorífica del año junto a la pequeña North West, que también lució dos disfraces diferentes.
Pocos son los estadounidenses que la noche del 31 de octubre no decoran sus casas con calabazas o pronuncian la famosa frase "Trick or treat?" disfrazados de cualquier personaje de terror para dar algún que otro susto y celebrar Halloween. Por supuesto, las celebrities también se apuntan a esta fiesta, y ellas, como siempre, lo hacen por todo lo alto.
Kim Kardashian no podía ser menos que las demás, y, si en años anteriores la hemos visto disfrazada de una sensual Catwoman enfundada en un traje de cuero y con los colmillos bien afilados, o de leopardo y luciendo escote, este año hemos tenido disfraz por partida doble. Siempre conectada a sus redes sociales, Kim nos ha mostrado no solo sus difraces, sino también los de la pequeña North West, que ha celebrado su primera fiesta de Halloween este año 2014.
Primero, Kim ha compartido tres fotografías de North, que iba disfrazada de una pequeña y adorable mofetita muy estilosa: "Una mofeta anda suelta!", escribía Kim desde su cuenta personal de Instagram. "Mi pequeño bichito está esperando para enseñarle a papi su disfraz. Halloween ha empezado pronto esta mañana", añadía más tarde.
Horas más tarde, Kim compartía un par de fotografías con todos sus seguidores para enseñarles su disfraz y su elaborado maquillaje. ¿De qué se trataba? Pues sin duda, de un terrorífico esqueleto que Kim había hecho con un mallot ajustado negro pintado con todos los huesos. El maquillaje, por supuesto, emulaba a una calavera con ayuda de pintura blanca y negra: "Primer look!", añadía Kim en el pie de foto.
Kim Kardashian homenajea a Anna Wintour
Y es que la protagonista de 'Keeping up with the Kardashians' tenía preparado un segundo disfraz, aunque este no daba tanto miedo como el anterior. Kim decidió hacer un guiñito a Anna Wintour -quizás por haberla elegido como portada de la revista Vogue en el número de abril 2014- y se plantó una peluca con su mismo corte de pelo, grandes gafas de sol y un conjunto de tweed que perfectamente podría haber lucido la prestigiosa editora. Ahí no acabó la cosa: North West acompañó a su madre y, con una especie de túnica negra y un maxi-collar de bolas del mismo color, imitó a otra gran figura del mundo de la moda: André Leon Talley, exeditor de Vogue durante varios años.
Para rematar la estampa, su amiga Joyce Bonelli copió el estilo de Grace Coddington -directora creativa de la versión americana de la misma revista- con su característica melena pelirroja, su pálida tez y sus labios rojos; ¿La guinda del pastel? el hijo pequeño de Joyce, con el pelo color ceniza, pajarita y chaqueta de cuero, clavadito al director de Chanel Karl Lagerfeld.