Ella es Mercedes García, que fuera pareja de Lorenzo entre octubre de 2012 y febrero de 2014. Tal y como ella misma relata en una conversación con El Español, el actor era todo un "galán, un seductor que se gana la confianza y el favor de las mujeres muy poco a poco". También el suyo, motivo por el que empezaron a salir a las pocas semanas de conocerse por una amiga en común. La presunta víctima decidía entonces hacer a su pareja gestor y administrador de una empresa que estaba montando -un vivero llamado Desert City- para que gestionara las nóminas de los trabajadores así como de los gastos y movimientos bancarios que hubiese que hacer.
"Es muy ambicioso y estaba obsesionado con el dinero, pero no pensaba que sería tan maquiavélico", dice ahora después de haber sido una de las -presuntas- víctimas a las que más dinero habría conseguido sacar el actor. Aunque mientras lo hacía esta no se percataba de nada porque el amor estaba por encima de todo: "Llevábamos seis meses saliendo y le veía muy dispuesto a ayudarme, muy entregado. Cuando compré la finca él montó una compañía que facturaba a la mía mediante un contrato de gestión y administración de la empresa, pero me estaba engañando".
"Es muy ambicioso y estaba obsesionado con el dinero"
Pero además de sentirse estafada económicamente también lo estuvo sentimentalmente. Fue precisamente la persona que les prestó, abogada y amiga íntima por aquel entonces de Mercedes, la que descubrió la infidelidad con Arantxa Palomino, la que ahora es su mujer, madre de sus hijos y sobrina de la mujer fallecida. Recibió la fotos de ambos juntos durante un viaje a Nueva York y en ese mismo momento se lo dijo: "Él se quedó blanco, me siguió corriendo y se puso a llorar, a pedirme perdón. Estaba tan nervioso que empezó a fumar, cosa que yo nunca le había visto hacer". Pero ella prefirió creerlo a él antes que a su amiga, motivo por el que perdió la relación con ella. Tras la infidelidad, se descubrió todo lo anterior, los engaños enconómicos.