Son muchas las familias cuyas profesiones se pasan de padres a hijos, o de hermanos a hermanos. Abogados, periodistas o médicos son solo algunos ejemplos, sin embargo muchos de estos clanes saltan a la escena pública cuando una noticia implica a todos sus miembros.
Este es el caso de los Sánchez Vicario, una de las familias de tenistas más conocida del panorama nacional. Marisa, Emilio, Javier y Arantxa son cuatro hermanos muy conocidos en el país, y son hijos de Emilio Sánchez Benito, fallecido en 2016, y María Luisa Vicario Rubio.
La relación de esta mediática familia se ha visto expuesta en múltiples ocasiones, y es que a pesar de que parecía que tenían una idílica relación, todo saltó por los aires en el año 2012 tras las acusaciones de la más pequeña. ¿Cómo son y cómo se llevan realmente los Sánchez Vicario?
Marisa Sánchez Vicario
La mayor del clan es Marisa Sánchez Vicario, nacida el 2 de abril de 1964, y es la más discreta de la familia. Su vida privada siempre se ha mantenido en un segundo plano, y es que de todos los hermanos ella es, indudablemente, la que menos ha salido en los medios de comunicación.
Tanto es así que poco se sabe sobre ella, aunque en su momento también pisó varias pistas de tenis al gestionar la agenda de su hermana Arantxa. La primogénita sufrió un duro golpe cuando en el año 2013 su marido fallecía de un infarto en su presencia. A pesar de ello, Marisa Sánchez Vicario ha sabido salir adelante y ser la más conciliadora del clan.
Emilio Sánchez Vicario
El siguiente en la familia es Emilio Sánchez Vicario, quien fue uno de los tenistas españoles más importantes de la década de los 80. Nacido el día 29 de mayo de 1965, su carrera como deportista tuvo tanto éxito que incluso fue número uno del mundo al ganar varios partidos en categoría de dobles.
Al retirarse, Emilio Sánchez Vicario fundó una escuela de tenis donde colaboran también Arantxa y Javier, dos de sus hermanos tenistas. Estos triunfos profesionales le llevaron a ser comentarista de TVE en el año 2008, aunque su vida personal también le sonríe. Casado con Simona Bronzetti desde hace bastantes años, Emilio Sánchez Vicario es padre de cuatro hijos junto a su mujer: Victoria (2001), Emilio (2003), Valeria (2006) y Simón (2013).
Javier Sánchez Vicario
Javier Sánchez Vicario nació el 1 de febrero del año 2968 y, como su hermano mayor, también quiso ser tenista desde muy pequeño. Ganó varios títulos individuales y dobles, en los que era todo un experto como su hermano, aunque desde su retirada se dedica a dirigir Greenset, una empresa dedicada a la producción de revestimientos sintéticos para pistas de tenis.
El amor también sonríe para Javier Sánchez Vicario desde que se casó con Isabel Ruiz, con quien tiene dos hijas a las que adora. Ha sido profesor de tenis y entrenador personal de varios personajes importantes del país, aunque en la actualidad está al frente de varios proyectos, además de su empresa.
Arantxa Sánchez Vicario
La gran afición al tenis de la familia Sánchez Vicario pronto llegaría a la más pequeña y la más conocida del clan. Arantxa Sánchez Vicario nació el 18 de diciembre de 1971, y es conocida por ser una de las tenistas más reconocidas del país gracias a su extensa y exitosa carrera deportiva.
Siendo la número 1 del mundo, Arantxa Sánchez Vicario anunció su retirada en el año 2002, pero tuvo bastantes idas y venidas. En 2004 jugaría los Juegos Olímpicos, y en 2012 regresaría a la competición como capitana de la Copa Federación, aunque al no conseguir ninguna victoria fue animada a retirarse definitivamente.
La vida amorosa de la tenista, al contrario que a sus hermanos, no ha sonreído en exceso. Su primer matrimonio data del año 2000 con el periodista Joan Vehils, aunque esta relación duró tan solo un año. En 2008 se volvió a casar con José Santacana Blanch y, un año más tarde, nacería su primera hija llamada Arantxa. En el año 2011 nació su segundo hijo, Leo, pero todo se torció cuando en 2018 el matrimonio decidió poner punto y final a tantos años de convivencia.
Uno de los peores momentos de la vida de la benjamina del clan fue, sin duda, cuando el Tribunal Supremo le obligó a pagar una considerable suma de dinero a la Hacienda pública por entender que defraudó durante varios años. Tras perder el juicio, Arantxa Sánchez Vicario tuvo que pagar todos los impuestos que no pagó durante ese período, cayendo prácticamente en la ruina.
La relación de los hermanos Sánchez Vicario
Marisa, Emilio, Javier y Arantxa se criaron juntos, y aunque pasaron una infancia muy feliz, en el año 2012 todo se torció. La más pequeña del clan, después de la celebración de los juicios por fraude fiscal, decidió escribir una autobiografía en el que contaba el excesivo control al que estaba sometida por parte de sus padres, tanto en su vida como en su dinero.
'¡Vamos! Memorias de una lucha, una vida y una mujer' hizo tanto daño a su familia que Arantxa Sánchez Vicario rompió toda relación posible con ellos. Tanto es así, que incluso en el funeral de su propio padre, sus hermanos le echaron del tanatorio tanto a ella como a su ex marido.
El dolor que causó la autobiografía todavía sigue estando presente en la familia, sin embargo, con el reciente divorcio que ha tenido que vivir la conocida tenista todo apunta a que podría haber una posible reconciliación entre ellos. Los hermanos están arropando a la pequeña, e incluso está viviendo con su hermano Emilio, algo que sorprendió a todo el mundo ya que cuando todo saltó por los aires nadie se imaginaba que la familia de tenistas fuera a reconciliarse.