Después de una semana muy muy complicada, en la que tuvo que pasar varios días en el hospital para que le administrasen una medicación para tratar de evitar un parto prematuro por las fuertes contracciones que estaba sufriendo, Tamara Gorro está guardando riguroso reposo y su última visita al médico no podía haber sido más exitosa.
Ahora mismo el bebé ya pesa dos kilos y tiene el tamaño de una piña, pero su proceso de desarrollo -aunque esté completamente formado- no ha terminado, por lo que es necesario tratar de que se llegue a la últimas o las ultimísimas semanas de embarazo.
Tamara Gorro, una cumplidora
Durante la revisión médica, Tamara Gorro ha mostrado a sus seguidores las diferentes pruebas que le han hecho, la correspondiente ecografía y, guardando la intimidad de su doctor, le ha pedido que repitiese la enhorabuena que le había dado porque el tratamiento había salido según lo esperado.
"Una semana y siempre voy a decir lo mismo. Lucha, fuerza, constancia y nunca rendirse, ¿qué es rendirse? Esto no está en nuestro vocabulario ", terminaba diciendo dando una vez más al tiempo que agradecía a todos sus seguidores lo mucho que le animan y lo mucho que se preocupan por ella: "Sin vosotros ese chute de energía no lo tendría".