La muerte de José Antonio Reyes podría dar un giro después de que Miryam Moya, perito especialista en accidentes de tráfico, tenga una nueva hipótesis en la que indica que quizás podría no haber muerto. Tras hacer un estudio de campo, como adelanta El Español, llegó a la conclusión de que el quitamiendos, según recomienda la normativa, tendría que haber estado colocado mucho antes.
Este hecho daría un giro muy importante a la investigación después de que el futbolista se saliera de la carreteara cuando iba acompañado de sus dos primos, Jonathan Reyes, que también murió, y Juan Manuel Calderón, que por fin fue dado de alta. En su momento se tuvieron en cuenta otras hipótesis, como que se salió por su exceso de velocidad o por un supuesto fallo en uno de los neumáticos traseros. Quizás estos dos factores, sumados al supuesto fallo del quitamiedos y su colocación tengan mucho peso en su muerte.
De momento sigue sin haber una causa concreta, aunque la perito deja claro que el conductor no deberá de haberse salido del arcén porque es una carretera de calzadas separadas y el quitamiedos tiene que estar situado a 100 metros cuando hay una obra de drenaje. En caso de que la barrera hubiese estado colocada antes, el coche se hubiese chocado contra ella.
Podría cambiar la investigación
"El quitamiedos tenía 54 metros más los 16 lineales (70, en total) y el coche cae 29 metros antes. Por lo tanto, la barrera de seguridad no realizó su función, que es evitar que los vehículos que se salen de la calzada alcancen un obstáculo o un desnivel, con la tragedia que conlleva", ha contado la perito a dicho medio. Y lo que no se sabe es si se hubiese podido evitar el accidente, como ella ha concluido: "Eso es imposible de saber. El quitamiedos no evita el accidente, pero sí que sea de menor nivel. Esto hubiera hecho que el coche no hubiera quedado boca abajo y probablemente el Mercedes no se habría incendiado, pero no se sabe si habría salido con vida ".