Gerard Piqué y Shakira atraviesan un magnífico momento tanto profesional, pues sus carreras siguen marchando a la perfección, mientras su relación se afianza aún más y esperan con ilusión el nacimiento de su primer hijo.
Sin embargo el escándalo persigue a la pareja, pues la revista Interviú publica esta semana el testimonio de un famoso representante de actores y presentaciones que asegura que ha visto el vídeo sexual protagonizado por Piqué y Shakira, un producto por el que ambos habrían sido chantajeados.
Esta persona, que ha confesado que dos personas que no son los exempleados de Shakira que habrían comenzado la polémica le citaron en el reservado de un restaurante de Barcelona y le mostraron el vídeo, de quince minutos de duración, con el requerimiento de que lo hiciera circular.
El testigo relató a la revista que el vídeo está grabado con un teléfono móvil y que su calidad es ínfima, aunque se puede apreciar que unos supuestos Piqué y Shakira se encontraban en un barco. Allí ambos se encuentran relajados y comienzan un juego que termina en sexo.
Pese a que el escándalo sería de grandes proporciones, no está claro que sean ellos quienes protagonicen este vídeo, ni tampoco que sea real, pues el propio representante que ha visto el material apunta a que ha pensado que podría ser un montaje.
La demanda de Shakira por extorsión y difamación
En ese sentido, Shakira no hubo más remedio que poner cartas en el asunto por el chantaje que está recibiendo por parte de dos exempleados domésticos de la colombiana que aseguran tener material erótico de la cantante y Gerard Piqué, el mismo que vio el citado representante.
El letrado de Shakira, Ezequiel A. Camerini, del bufete Fox Horan & Camerini LLP de Nueva York, señaló que rechazan "todos los fundamentos de hecho y derecho incluidos en la demanda presentada por los exempleados. Los hechos allí descritos no se ajustan a la realidad, y carecen de fundamento ".
Camerini también afirma que están preparando una demanda por extorsión y difamación porque entienden "que en el fondo de este asunto hay otros intereses que los incluidos en la demanda y se evidencia una clara intención de difamar y hacer daño a mi clienta mediante el aprovechamiento de su figura pública e intachable reputación personal y profesional a cambio de dinero".