Gerard Piqué parece tener mucha mano con los niños, lo que demuestra día a día con su hijo Milan y de vez en cuando con desconocidos. Y es que el jugador tuvo un bonito gesto con un niño que gritaba su nombre.
Gerard Piqué, muy amable con sus fans
Sin pensárselo dos veces se quitó la camiseta y se la dio, un detalle que llegó al alma del niño tanto que se puso a llorar de la emoción, y es que uno de sus ídolos se había fijado en él.
El jugador catalán es consciente de que los futbolistas son ídolos de masas y por ello no duda en comportarse siempre de forma muy amable con sus fans, que son muchos.