La empresaria lo ha pasado muy mal, pero por suerte se recupera en casa, ya que las consecuencias podrían haber sido fatales.
Genoveva Casanova ha preocupado mucho a su entorno después de haber sufrido un infarto pulmonar causado por una embolia. Tras haber estado unos ocho días ingresada, ha recibido el alta y ahora se recupera en su casa arropada por su familia, contando con el apoyo de sus hijos y también de amistades cercanas.
Pese a que ella no ha hablado directamente con ningún medio, sí que ha sido vista y capturada por algunas cámaras, pero ha esperado a hablar con su amiga Patricia Cerezo, exmujer de Ramón García, para contar un poco cómo se siente a través de ella, la encargada de hacer llegar el mensaje. Ha sido en el programa 'Así es la vida' donde Cerezo ha trasladado las palabras de Casanova, diciendo: "Le puede ocurrir a cualquiera". Y es que Genoveva Casanova siempre se ha caracterizado por ser una mujer sana, con una buena alimentación, practica deporte, no fuma y no tenía ninguna enfermedad previa, por lo que nada hacía presagiar que le fuera a ocurrir algo así. Además, también han descartado que se trate de algo genético. Mientras, Patricia cerezo ha comentado: "No descartan que pueda ser una secuela del covid".
Y todo en ella comenzó con unos dolores de espalda muy fuertes. Pensó en un primer momento que se trataba de una contractura y lo dejó pasar, pero a los días el dolor era insoportable, por eso decidió acudir a urgencias, y fue en ese momento cuando se quedó ingresada, y de no ser así las consecuencias podrían haber sido fatales. Entre tanto y con dichos dolores, viajó a Londres a la graduación de su hija, pero por aquel momento no era consciente de la gravedad de lo que le ocurría, ya que jamás se lo hubiese imaginado. Una 'segunda vida'
"Entró en una especie de pesadilla, tuvo la suerte de tener una doctora en urgencias que intuye que puede ser una embolia pulmonar y le inyecta heparina", ha comentado Patricia Cerezo sobre cómo sucedió todo. Tras hacerle unas pruebas, le confirmaron el diagnóstico, que además añadía que su corazón ha quedado un poco dañado. "Tiene suerte, lo está superando, es joven, sana y va a vivir de por vida con una medicación crónica, pero que puede evitar que le vuelva a ocurrir. Se lo toma como una segunda vida, una segunda oportunidad", terminaba Cerezo.