Mientras Gareth Bale vive tranquilo con su familia en Madrid, formada por su prometida, Emma Rhys-Jones y sus dos hijas, en Reino Unido, sus parientes politícos estan atravesando un infierno que por el momento no tiene visos de terminar.
Como señala The Sun, la tía de Emma Rhys-Jones, Annabella Williams, fue detenida el pasado viernes 11 de noviembre cuando se encontraba en casa de un familiar. La señora Williams fue liberada tras pagar una fianza, aunque ha sido acusada de blanqueo de capitales.
Durante la detención, la Policía se llevó un bolso con droga, dinero y joyas que tienen un valor de más de 1 millón de euros. Según las pesquisas de la Policía, una banda de narcos de Oriente Medio estaba buscando la citada bolsa, motivo por el cual el pasado septiembre fue atacada la casa de los abuelos de la prometida de Bale. Unas personas no identificadas tiraron ladrillos contra las ventanas, forzaron la puerta principal y quemaron con gasolina el coche. Posteriormente, la propia Anabella Williams fue objeto de los ataques, quemándose un coche cercano a su casa.
No es lo que parece
En un primer momento se pensó que este ataque podría haber sido motivado por los delitos del padre de Emma, Martin Rhys-Jones, que estafó 2,6 millones de euros al vender acciones sin valor a precios desorbitados a 250 personas de Reino Unido, Estados y Canadá. Para más inri, algunas de estas personas eran enfermos de alzhéimer. Por este motivo, fue condenado a 6 años de cárcel.
Desde España, los Bale ven estos ataques con preocupación, y no solo por el bienestar de la familia de Emma Rhys-Jones, sino por ellos mismos. Así, el futbolista habría reforzado en su momento la seguridad de su casa de Madrid para protegerse de una hipotética agresión contra su familia.