Jamala, quien se dio a conocer de manera internacional después de ganar el Festival de Eurovisión 2016 representando a Ucrania, está enseñando a través de sus redes sociales el horror que está viviendo por la guerra que se ha desatado en su país después de que los soldados rusos hayan comenzado a atacar sus hogares, haciendo que muchas personas, como ella, tengan que huir en busca de su supervivencia.
Lo cierto es que la trágica historia de su familia vuelve a repetirse casi un siglo después. La cantante se ha convertido en una de las miles y miles de personas que se han tenido que marchar de su país en busca de un futuro, y ella lo ha hecho acompañada de sus hijos. Ella misma ha contado a través de sus redes sociales que se trata de una pesadilla de la que está deseando despertar cuando antes.
La artista, cuyo nombre real es Susana Alimivna Jamaladinova, decidía abandonar su casa de Kiev el pasado jueves por la noche con sus familiares en dirección a un lugar alejado de las bombas. Su destino para refugiarse iba a ser Biolorrusia, por eso se montaron en un coche y llegaron a los numerosos atascos de horas que se han formado para salir de la ciudad. "Hacíamos dos kilómetros cada cuatro horas", dijo, contando a lo que se estaban enfrentando.
Entretanto, ha contado que todo esto lo hicieron sin comida y estando en estado de shock por lo que supone irse con lo puesto y tomar una decisión así. "¡No entiendo este maldito horror!", decía entre lágrimas en uno de los vídeos que ha compartido. Por otro lado, ha mandado un mensaje de apoyo a Volodimir Zelenski, el Presidente de Ucrania, y a los hombres que luchan junto a él, para pedir por último al pueblo ruso que no se deje engañar y se rebele contra su propio gobierno para detener esta locura.
Su periplo lo ha comenzado a hacer junto a sus dos hijos, enseñando fotos de cómo se han ido refugiando. Por otro lado, también ha enseñado refugios llenos de niños y ha contado que está indignada por las numerosas situaciones llenas de caos y miedo que se están dando, situaciones que implican que muchas mujeres estén dando a luz en sótanos sin poder ir a los hospitales por el riesgo de morir por un ataque o una bomba.
Jamala se hizo muy popular tras ganar el Festival de la canción en Estocolmo en 2016. Lo cierto es que no se libró de la polémica, porque aunque las canciones que se presentan a este concurso no pueden incluir mensajes políticos, ella arriesgó y ganó. Su letra y título, '1944', hacía referencia a la deportación masiva de los tártaros de Crimea, algo ocurrido en el siglo pasado, haciendo referencia al éxodo como ahora, que fue provocado por la Unión Soviética de Stalin.
La historia se repite
Para ello, se inspiró en la historia de su bisabuela, quien siendo una joven veinteañera tuvo que emigrar a Asia Central junto a sus cinco hijos buscando un futuro mejor. Casi 80 años después, por desgracia la historia se está volviendo a repetir y la está viviendo en sus carnes.