Gabriela Guillén no está atravesando su mejor momento después de convertirse en madre por primera vez. La que tuviese una breve relación con Bertín Osborne ha dado la bienvenida a su primer hijo, pero en medio de la felicidad de disfrutar de esta etapa también se está enfrentando a la presión mediática, es por eso que ha pedido a los reporteros que se han acercado hasta su vivienda un poco de tranquilidad y respeto, sobre todo para su madre y para su familia.
Mientras tanto todo parece indicar que Bertín Osborne no se ha desplazado hasta Madrid para poder conocer al que sería su séptimo hijo. Él mismo hizo saber que sería responsable en caso de que la prueba de ADN sea positiva, si bien es cierto, lo que tiene muy claro es que no tiene intención de ejercer como padre aunque lo sea.
Es por esta razón que Gabriela Guillén se está enfrentando a la maternidad en solitario, aunque contando en todo momento con el apoyo de su familia. La empresaria ha sido vista dando uno de sus primeros paseos con su bebé recién nacido, y ha aparecido con semblante bastante serio y visiblemente cansada, algo completamente normal ahora que se está adaptando a su nueva vida de mamá.
Entiende que los medios tengan que hacer su trabajo pero lo que no está dispuesta a tolerar es que su familia sea acosada en todo momento y que tenga que lidiar con la presión mediática una vez con el pie en el suelo de la calle. Sus palabras han sido las siguientes cuando ha hablado de manera bastante cortante con la prensa: "Lo que no voy a permitir es el acoso a mi madre y a mi familia".
Mucha tensión
En cuanto a cómo es su hijo, esto es lo que ha contestado: "Él es lo único bueno que tengo, no duermo", pero la cosa se ha puesto más seria cuando le han preguntado directamente por Bertín Osborne, momento en el que accedía al portal de su piso. De manera rotunda ha dicho: "Si queréis que os conteste, no me habléis de esta persona". Todo parece apuntar a que su relación con él es nula y que tampoco habría mostrado interés por el pequeño.