Después de que el año pasado en Huesca, Fran Rivera recibiera una de las peores cornadas de su carrera, este viernes el torero decidió volver al mismo lugar para afrontar sus miedos y salir triunfante.
A la cita no pudo faltar su mujer, Lourdes Montes y su hermano, Cayetano Rivera, que son los grandes apoyos del torero. Antes de entrar a la plaza para torear, Francisco Rivera decidió visitar el Santuario de Loreto, que fue el lugar de nacimiento de San Lorenzo, santo al que el torero tiene una gran devoción después de lo que le ocurrió el año pasado.
Una vez en la ermita fue nombrado embajador honorífico de la asociación 'Huesca Cuna de San Lorenzo' donde recibió un diploma, un pañuelo y se fotografió con diversos miembros de esta asociación. Desde la asociación quedaron muy agradecidos porque Francisco Rivera acudiera a visitarles y así lo hicieron saber mediante su Facebook: " Quedamos eternamente agradecidos a Francisco Rivera ".
Salió por la puerta grande y cortó dos orejas
Los acontecimientos esta vez se desarrollaron, por suerte, de forma distinta a los del año pasado ya que el torero salió airoso del ruedo y salió por la puerta grande cortando dos orejas, por lo que no podía estar más feliz y así lo mostró en su cuenta de Twitter: " Bonito día el de ayer ".