Quienes sí estuvieron fueron los demás familiares directos de Íñigo Onieva, empezando por su padre. El progenitor del empresario, que se llama como él, apareció junto a su segunda esposa, con la que reside en México. Pese a la distancia y a tener otra vida, padre e hijo tienen muy buena relación y Onieva no dudó en cruzar el Atlántico para estar con su vástago en uno de los días más felices de su vida.
Después llegó Íñigo Onieva, que estaba radiante de felicidad y no demasiado nervioso. Se le vio cómodo y no dudó en saludar a las cámaras que daban cuenta de todos sus movimientos. Con más cariño, evidentemente, saludó a los amigos que estaban ya allí y que le dieron la bienvenida a su gran fiesta.
La novia apareció en un coche conducía su cuñado, Fernando Verdasco. En este mismo vehículo viajaban sus hermanas Chábeli Iglesias y Ana Boyer. Fue así la ocasión para volver a ver a la hija mayor de Julio Iglesias e Isabel Preysler, que reside en Miami con su marido y sus hijos y apenas se deja ver públicamente. No se vio a Julio José Iglesias, que sí ha venido a España para la boda, mientras que su hermano Enrique Iglesias no ha acudido porque al parecer no le gustan los enlaces. Su ausencia ha venido unida de la de Anna Kournikova, que también se ha quedado en Estados Unidos.
La Marquesa de Griñón mostró al llegar su traje para la fiesta preboda. Se trata de un dos piezas blanco de la colección TFP by Tamara Falcó en colaboración con Pedro del Hierro, un atuendo diseñado por ella misma que lució con orgullo en esta fiesta. Tamara Falcó se mostró feliz, sonriente e ilusionada al entrar en una fiesta en la que estuvieron además amigos como Juan Avellaneda, Vicky Martín Berrocal o Eugenia Martínez de Irujo y Narcís Rebollo, entre otros muchos.
Además, Manuel Falcó, hermano de Tamara Falcó y padrino de la boda, su esposa Amparo Corsini, Álvaro Castillejo y su esposa Cristina Fernández, primos maternos de Tamara Falcó, y Álvaro Falcó e Isabelle Junot, primos paternos de la Marquesa de Griñón, tampoco se perdieron la fiesta. Fue además la primera aparición pública de los Marqueses de Cubas desde el nacimiento de su hija Philippa, nacida el 11 de junio de 2023.
Un romántico beso de despedida
A la salida de la fiesta, tras haber disfrutado de una noche de diversión, Tamara Falcó e Íñigo Onieva abandonaron el establecimiento juntos. Antes de ellos lo habían hecho Ana Boyer y Fernando Verdasco, mientras que la pareja fue escoltada por Chábeli Iglesias.
Antes de subir a un coche que conducía Ana Boyer, Íñigo Onieva se acercó a la Marquesa de Griñón y le dio un romántico y apasionado beso a modo de despedida. Como marca la tradición, ambos pasaron separados la noche antes de su boda. A partir del 8 de julio de 2023, comienza una nueva vida para Tamara Falcó e Íñigo Onieva que esperan pasar juntos para siempre.