Desde que falleciera el dictador Francisco Franco, el 20 de noviembre de 1975, sus descendientes no han dejado de estar en el foco mediático ni un solo año. Aunque Franco dejó una única hija, fruto de su relación con Carmen Polo, Carmen Franco tuvo nada menos que siete hijos con el doctor Cristóbal Martínez-Bordiú, por lo que el legado del clan ha sido lo suficiente extenso.
La recientemente fallecida hija del dictador, Carmen Franco Polo, llevó una vida marcada principalmente por la discreción, debido a la larga sombra que dejó la figura de su padre. Sin embargo, su vida no ha estado exenta de controversias, especialmente las que conciernen al patrimonio familiar. Aparte de esto, Carmen Franco fue bastante criticada cuando se publicó el libro con sus memorias 'Franco, mi padre' en 2008, pues en el mismo se ensalzaba la figura del dictador y se describían los años del régimen con bastantes eufemismos.
Por lo demás, han sido sus siete hijos quienes han protagonizado las situaciones menos idílicas de la familia. Desde 'la nietísima' más mediática, la primogénita de Camen Franco, Carmen Martínez-Bordiú, hasta los recientes problemas penales de Francis Franco, pasando por el resto de nietos del dictador, Mariola, Merry, Cristóbal, Arantxa y Jaime. La relación de los hermanos nunca ha destacado por ser perfecta, una situación que el fallecimiento de la matriarca no ha hecho más que agravar.
El ducado de Franco y la caída de Francis
Una de las polémicas más recientes ha sido generada por la muerte de Carmen Franco Polo a causa de un cáncer el pasado 29 de diciembre. Pocos días después de la muerte de su padre, el Rey Juan Carlos le otorgó el Ducado de Franco con Grandeza de España. Por su parte, a la viuda Carmen Polo se le concedió el Señorío de Meirás, un título que su nieto Francis reclamó tras su muerte y que posee desde entonces. Además, el primer varón de Carmen Franco ostenta el Marquesado de Villaverde, que heredó de su padre.
En una reunión familiar se acordó, al parecer, que Francis Franco cediera a su hermana mayor el título de Marqués de Villaverde, a cambio de que, cuando muriera su madre, esta le diera a él el Ducado de Franco, ya que es el único de los nietos que lleva su apellido primero. Sin embargo, Carmen Martínez-Bordiú parece habérselo pensado mejor y ha desoído cualquier pacto entre hermanos, truncando los deseos de su hermano de ostentar este título. Ella misma ha confirmado que quiere y tiene la intención de ser la II Duquesa de Franco, acogiéndose a la Ley de Igualdad para Sucesión de Títulos Nobiliarios de 2006. De ser así, paradójicamente, el título lo heredaría posteriormente su hijo Luis Alfonso de Borbón.
Por si fuera poco, a Francis Franco le ha sido arrebatado el papel de 'cabeza de familia', que ha pasado a ostentar su hermano Cristóbal Martínez-Bordiú. La posición de Francis Franco en las empresas familiares tampoco es muy alentadora. En Sargo Consulting S.L. su cargo de apoderado es limitado, y en Fiolasa S.L., dedicada al alquiler de inmuebles, simplemente es consejero, mientras que Cristóbal Martínez Bordiú preside y Arantxa Martínez Bordú es la única apoderada.
Problemas con la justicia
Siguiendo con Francis Franco, el primer nieto varón del dictador ha comenzado el año con una de las peores noticias que podían darle, y es que ha sido condenado a dos años y medio de prisión y a pagar una importante suma de dinero. ¿El motivo? Haber desobedecido a la Guardia Civil, embestir el coche patrulla, herir a un agente y darse a la fuga. Unos hechos que tuvieron lugar cuando se encontraba de caza en el año 2012 y que él niega rotundamente. Francis Franco ha recurrido la sentencia, por lo que aun se desconoce si podrá evitar la cárcel.
Por su parte, Carmen Martínez-Bordiú deberá responder también en nombre de su madre por una demanda que interpuso contra ella el Ayuntamiento de Santiago de Compostela por el caso del Pórtico de la Gloria. El motivo de la discordia no es otro que la familia tiene en su poder unas estatuas que representan a Abraham e Isaac expresamente confeccionadas para este pórtico y que, según el ayuntamiento compostelano, carece de legitimidad para poseer.El Pazo de Meirás
Gran parte del patrimonio de la familia Franco se encuentra en Galicia. Las polémicas en torno a la posible devolución y beneficios que obtienen de estas propiedades, entre las que se encuentran el Pazo de Meirás, el Palacio de Cornide o la finca del conde de Romanones, están hoy más que nunca en el ojo del huracán. Recientemente se publicaba que los Franco habían puesto a la venta el Pazo de Meirás por 8 millones de euros, cuando ellos lo obtuvieron gratis.
Esta supuesta venta, que Jaime Martínez-Bordiú ha negado, coincide con una época de clamor social que demanda la devolución de este palacio al pueblo gallego. En verano de 2017 se llegó incluso a hablar de su expropiación, pero lo cierto es que las especulaciones nunca han cesado, especialmente las que involucran a la familia en amenazas y extorsiones por esta finca, de la cual llegaron incluso a solicitar que cerrase sus visitas al público.
Drogas y malos tratos
Aunque a día de hoy parece estar ya recuperado, el nieto menor de Franco, Jaime Martínez-Bordiú, no ha llevado tampoco una vida demasiado ejemplar. El benjamín de los Martínez-Bordiú y Franco se dedicó durante muchos años a pasear su vida por los platós de televisión y las portadas de las revistas. De hecho, fue en pantalla donde reconoció que era adicto a la cocaína.
Sin embargo, fue en 2010 cuando vivió una de las épocas más difíciles. Tras separarse de Nuria March, Jaime Martínez Bordiú ha tenido varias relaciones sentimentales, entre las que destacan Patricia Olmedilla y Ruth Martínez. Esta última lo denunció y ese año fue condenado por malos tratos hacia su expareja. Además, estuvo salpicado por un caso de narcotráfico. En una de sus últimas declaraciones, en el año 2015, aseguró que todos sus problemas estaban "solucionados".
La sexualidad del dictador
Si hay un miembro que ha vivido enteramente de su historia familiar y personal, esa es Carmen Martínez-Bordiú, 'la nietísima', que públicamente ha reconocido sin tapujos que ha vivido toda su vida "sin trabajar". Por supuesto, tampoco ha desaprovechado la oportunidad, cuando se le ha brindado, de hablar sobre su abuelo. Así lo hizo en una de sus entrevistas más completas, en el programa 'En tu casa o en la mía' en octubre de 2015.
Carmen habló de sus sentimientos con Bertín Osborne, a quien aseguró que creía que todo el mundo en el fondo es bisexual. Ante tal afirmación, el presentador le preguntó si su abuelo Francisco Franco también lo era, y es que la sexualidad del dictador siempre había sido un tema tabú y no exento de chascarrillos populares. "Mi abuelo, yo creo, que no tenía tiempo de pensar en el sexo, el poder ya es una droga...", respondió Carmen Martínez-Bordiú, 'zanjando' el tema.
Amores... y desamores
Y, como no podía ser de otra manera, los matrimonios y divorcios de los Martínez-Bordiú y Franco siempre han dado mucho que hablar. Desde la polémica relación de Merry con el periodista Jimmy Jiménez-Arnau, que ha sido el azote de la familia incluso mucho tiempo después de su separación, hasta el reciente divorcio de Cristóbal Martínez-Bordiú y la presentadora José Toledo tras más de 30 años juntos, pasando por las fallidas relaciones de Jaime Martínez-Bordiú.
Pero si hay una vida amorosa que ha suscitado interés ha sido sin duda la de Carmen Martínez Bordiú. La primogénita se ha casado en tres ocasiones, la última con el empresario cántabro José Campos, de quien se divorció de forma nada amistosa. Posteriormente, Carmen Martínez Bordiú salió con Luis Miguel Rodríguez, 'El Chatarrero', afirmando que era la primera vez que se enamoraba, pero él le fue infiel. Actualmente su pareja es un joven australiano de 34 años, Tim McKeague, que según ella es "un terapeuta de la felicidad".
En definitiva, habrá que ver si con la ajetreada vida de los Martínez-Brodiú y Franco la familia puede hacer realidad el deseo de su madre para con ellos de no generar polémica y llevar una vida tranquila.