Ana María Aldón ha comenzado una nueva vida después de su divorcio con Ortega Cano. La diseñadora se ha comprado una casa en El Casar, en Guadalajara, y está arrancando con esta nueva etapa lejos de todos los que tanto le han perjudicado y junto a su hijo José. Ana María ha concedido una entrevista de lo más reveladora a la revista Hola, donde ha mostrado su nueva casa decorada al estilo revista y lo que supone un gran zasca para el lado de su marido, pues ha sido siempre el medio de confianza de todos ellos.
La entrevista comenzaba con el tema del famoso museo de Ortega Cano, presentación a la que Ana María Aldón no acudió: " Es que... ¿Qué necesidad tiene Ana María de ir al museo cuando Ana María ha vivido en el museo? Ese museo ha estado en la casa de Ana María. En las paredes, en las mesas, en los armarios... En todo. Habría sido de una incoherencia total por mi parte presentarme allí a sabiendas de que ¡no me quieren!", decía tajante.
Además, aseguraba que está en otra etapa completamente distinta: "Estoy por soñar cosas nuevas. Y volar. Volar lejos. Nadie me baja de ese carro". En cuanto a su nueva casa, tiene claro que ya es un hogar: " Mira, cuando yo entré en esta casa tenía muy claro que era mi hogar. Que iba a ser mi hogar. Yo tengo una intuición muy alta y, cuando entré aquí, supe que era mío. Era lo que cubría las necesidades de mi hijo. Eso, lo primero. Y después, las mías porque también tengo espacio para montar mi taller, que para mí será mi modo de vida. La tele puede ser efímera. Hoy estás y mañana puedes no estar. Hoy eres un personaje, mañana puedes no serlo".
Ana María Aldón ha hablado de su trabajo y lo que más le ilusiona: "Y yo tengo que pensar en el futuro de mi hijo. Va a cumplir diez años, el 9 de febrero. Es muy pequeño. Me necesita. Y tengo que pensar en los distintos caminos por los que puede transitar mi vida. Yo me he preparado. Tengo una carrera para algo, ¿no? Y para eso tengo ahí abajo -el taller estará en el sótano-, un espacio maravilloso donde montar mi atelier. Ahora mismo tengo lo básico para el bienestar de mi hijo y el mío y luego vendrá todo lo demás. Pero sí, tengo muchas ganas de montar mi taller y de abrir infinitas cajas. Tengo mi vida, mi ropa, todo, metido en cajas... Hay muchas cosas que ya no quiero en mi vida".
El peor momento de Ana María Aldón
Ana María Aldón ha contado que la razón por la que se mudó a Guadalajara fue básicamente económica: " Yo tengo mi casa en Cádiz. Y el hecho de tener una casa aquí, en Guadalajara, ha sido simplemente porque yo no me puedo permitir una vivienda al lado de la del padre de mi hijo. Ya me gustaría a mí poderme pagar una casa allí porque, además, cuanto menos trayecto tenga el niño de un sitio para otro, mejor para él; cuanto menos se le trastoque su día a día, su transporte al colegio, su círculo de amigos... mejor, obviamente. Pero yo me he venido adonde puedo".
Lo más doloroso de todo ha sido a la hora de hablar el momento en el que se planteó quitarse la vida, algo que nunca ha dicho tan claramente: "No quería el 'porque tú hiciste', el 'porque tú contaste'... No quería buscar culpables. Prefería desaparecer. Prefería irme... No podía quitarme esa idea de la cabeza: desaparecer. Era obsesivo. Me refiero a irme entera... Irme completamente. Hasta que apareció una persona, que ya estaba en mi vida y a la que dejé entrar, porque yo no dejaba entrar a nadie".
Su representante fue la persona que le salvó la vida como ella dice: "Yo llegó un día, que no era capaz de hacer la compra. Iba como zombi. Me aturullaba. La gente me miraba... Y yo, yo no encontraba mi sitio en el mundo. O lo había perdido. O es que no tenía que estar más en este mundo. No podía vivir. No quería vivir. Pero gracias a mi ángel de la guarda, como yo le llamo, él me puso en manos de especialistas... (...) Todo el mundo trata de ayudarte, pero de una manera que a ti no te satisface, aunque lo hagan con la mejor intención. Yo solo quería morirme".
Su relación con Ortega Cano
La diseñadora ha explicado que la segunda oportunidad que le pidió el torero llegó muy tarde: " Cuando me pidió esa segunda oportunidad y, además, de esa manera... tan... tan... Pfff. No era el momento. Ya había pasado. Era tarde. Y de la manera que lo hizo, ¿no? Yo necesitaba salir de ahí. Necesitaba empezar de nuevas y que empezaran los demás también". Además, ha hecho alusión a Rocío Jurado y su amor por ella: "El amor de su vida fue Rocío y eso no lo va a cambiar nadie".
"Cuando nos casamos, él ya había tenido al gran amor y había vivido muchas tardes de gloria y noches de pasión, pero la vida le había puesto a otras personas por el camino y, en este caso, aparecí yo. Yo creo que también tendría que ser un amor en su vida. A lo mejor, no al nivel de eso tan maravilloso que vivió con Rocío, pero, ¿un poquito al menos? Yo necesitaba saber que... que él me valoraba", lanzaba.
Por último, ha hecho alusión a su mala o nula relación con la familia de Ortega Cano, respondiendo al hecho de su mala relación con Rocío Flores en 'Supervivientes': "La situación era clara. Cuando llego a Supervivientes, coincido con una persona de la familia pero que no era de mi familia. Yo he ido a su casa, no sé dónde vive... Pertenece al clan, sí, pero yo sé quién es mi familia y no entendía aquello de: 'Tienes que estar conmigo y tienes que ir en contra de mis enemigos'. Pero vamos a ver, ¡si ni siquiera mi hija me pide eso!", zanjaba.