La víctima de la agresión fue herida en su rostro, dejándole una cicatriz de por vida, además de acabar con su carrera como modelo por 'destrozar' su físico, del que vivía. Además de la pena de cárcel, tendría que indemnizar a la víctima con 43.000 euros por las lesiones y secuelas causadas, así como pagar todos los gastos de cirugía estética tras someterse a varias intervenciones.
Al parecer las amigas de Ana, la víctima, no estaban comportándose de una manera ejemplar, y Mireia, camarera de la discoteca en la que se encontraban, estampó una copa contra la cara de la víctima, partiéndose en su frente, por lo que posteriormente con unos de los cristales rajó la cara de Ana.
Por su parte Mireia niega lo sucedido, y dice: "Yo no le he causado las heridas a esa chica, esto es un complot contra mí". Pero lo que sí que está claro es que las heridas de Ana tardaron 284 días en curarse, y que presenta parálisis en la zona izquierda de la boca, algo irrevocable. No solo ha abandonado su trabajo, sino que psicológicamente no ha conseguido recuperarse.
Ahora, después de se anunciara la condena el pasado 5 de julio, la resolución de la sentencia está en manos de los Tribunales. No osbtante, Mireia Torremocha ha vuelto a estar activa en las redes, y publicó una frase en Twitter: "Estoy en lo cierto y lo sé, que hable mi razón. Incluso si soy una minoría de uno solo, la verdad sigue siendo verdad".