Pese a que han separado sus caminos, todo parece apuntar a que pensaban hacer planes juntos para mejorar sus vidas y la de su hijo.
La ruptura de Eva González y Cayetano Rivera parece definitiva, y es que poco antes de que celebraran siete años casados se ha podido saber que llevan meses haciendo vidas por separado, pese a que en el verano de 2022 fueron vistos junto a su hijo disfrutando de una jornada de playa en Cádiz. Mientras que ella vive en Mairena de Alcor, su pueblo natal, él se ha refugiado en su finca de Ronda.
Ahora la revista Lecturas ha desvelado que pese a esta noticia, parece que tenían planes de futuro juntos, y que estaban a punto de cumplir uno de sus sueños, ya que tendrían planeado construirse su casa definitiva. Al parecer ambos compraron al 50 % una parcela de uso residencial en Mairena del Alcor (Sevilla), localidad en la que nació la modelo y en la que la pareja ha vivido desde la pandemia, es más, es donde está escolarizado su hijo Cayetano. Parece ser que ambos estaban pensando en hacerse una casa a su gusto, pero no han conseguido superar sus diferencias. Desde que su relación dio comienzo se han enfrentado a más de una crisis, aunque sin duda la más importante fue en 2013, es más, llegaron a estar separados durante nueve meses. En ese momento todo apuntaba a que las apretadas agendas de ambos habían tenido mucho que ver. Después retomaron su relación, sellando su amor en una boda celebrada en noviembre de 2015.
Otra crisis muy importante atravesada por la pareja tuvo lugar en 2019, cuando salieron a la luz unas fotos del torero en Londres acompañado por la abogada Karelys Rodríguez. Sin duda alguna se convirtieron en el detonante de un bache en su relación, aunque lejos del escándalo parece que salieron más fortalecidos y continuaron con su relación. Hasta ahora. Hay quienes señalan a este episodio como el detonante de algo irreversible, ya que Eva González no habría podido superarlo. Ella lo está pasando mal
Las cosas en los últimos tiempos han cambiado mucho en la presentadora, y es que según la revista Lecturas, la devoción de ella por Cayetano Rivera ha desaparecido: "Ella ha hablado muy bien de su marido siempre; eso sí, hace semanas que no lo nombra y está muy triste". Y así parece ser porque después de conocerse la noticia ella ha podido ser vista bastante cabizbaja y con semblante serio.