Aunque llevaban desde el pasado domingo 16 de noviembre, cuando ingresó grave en la UCI del Hospital Sagrado Corazón de Sevilla por una neumonía, preparándose para el fatal desenlace, la Casa de Alba está destrozada por la muerte de la Duquesa de Alba.
Pasadas las 12:30 horas de la mañana, después de un pequeño responso dentro del Palacio en la más estricta intimidad, los restos mortales de Doña Cayetana abandonaban Dueñas para recorrer varias calles de la ciudad hispalense hasta el Ayuntamiento de la ciudad, donde ha quedado abierta la capilla ardiente.
Hasta allí han llegado todos sus familiares -excepto Cayetano Martínez de Irujo, que ha sido el único que se ha quedado en Dueñas- completamente devastados, abrazándose unos a otros sin poder ocultar el complicadísimo momento por el que están pasando.
Los que estaban más visiblemente afectados eran Eugenia Martínez de Irujo, que ha buscado algo de consuelo abrazando a su hija Cayetana Rivera, el viudo Alfonso Díez -que se echaba a llorar de forma desconsolada a las puertas del Ayuntamiento- y su exnuera Genoveva Casanova, custodiada por sus hijos Amina y Luis.
Cayetano Martínez de Irujo permanece en el Palacio de las Dueñas
Todos ellos se han situado junto al féretro para recibir a todos los allegados, conocidos y personalidades de la vida social que estaban o han viajado a Sevilla para despedir a la Duquesa de Alba y arropar a su familia en estos duros momentos.
Entre ellos no podía faltar Carmen Tello. La mujer de Curro Romero siempre ha estado al lado de Doña Cayetana y, una vez que se ha conocido su muerte, no ha podido evitar emocionarse al hablar de los grandes consejos que recibió por su parte y la suerte que tuvo al "conocer a una gran mujer", declaraba en una conexión telefónica con 'El Programa de Ana Rosa'.