Para los Marqueses de Griñón no están siendo buenos momentos. El jueves 14 de marzo de 2019, Esther Doña tuvo que ser intervenida quirúrgicamente al sufrir dolencias en una de sus articulaciones. Según ha publicado la revista Semana, la marquesa de Griñón se sometió a una artrotomía, la incisión y apertura quirúrgica de una articulación para calmar y evitar alguna dolencia que se produce en la misma.
Esther Doña ha sido operada en el hospital universitario Quirón de Madrid. Pero no estaba sola. Su marido, Carlos Falcó, estuvo a su lado en todo momento. El Marqués de Griñón no se separó de su mujer en ningún momento, estando a su lado del tiempo que duró su hospitalización en una discreta habitación de la primera planta de dicho centro médico madrileño.
Es completamente normal que la operación haya pasado un poco desapercibida para los medios de comunicación, ya que desde que contrajeron matrimonio en 2017, los marqueses de Griñón han preferido mantener una vida tranquila y discreta. Solo se ha roto esta armonía cuando Esther Doña y Carlos Falcó tenían que acudir a algún evento entre la alta sociedad.
Preocupados por la salud de otro Falcó
Esta vez se trata de Fernando Falcó y Fernández de Córdoba, padrino de Tamara Falcó. Según ha informado Jaleos, el marqués de Cubas está bastante delicado en temas de salud. Esto lleva a que su familia esté muy preocupada por él, la cual no ha querido hacer declaraciones sobre esta situación.
Pero el mismo Fernando Falcó y Fernández de Córdoba si ha querido hablar: " Me estoy recuperando... Bueno, poco a poco ", ha asegurado aunque sin especificar que le pasa para que toda su familia y círculo de amigos más cercanos estén tan angustiados. A pesar de estos malos momentos, parece que ya han superado el bache y que todo ha salido bien.