La modelo no ha aguantado más y ha contado cómo ha vivido su ruptura y el paso que ha tenido que dar para encontrarse mejor.
Estela Grande ha decidido abrirse en canal para hablar de su separación de Diego Matamoros y lo ha hecho completamente destrozada en la revista Lecturas. Una de las cosas que ha dicho es que en cierto modo se arrepiente de haber propiciado una crisis que ha conseguido que su matrimonio haya acabado.
"He vivido cosas muy duras y difíciles", ha dicho contundente y más teniendo en cuenta lo que ha sufrido también por la familia de su todavía marido. La situación se le está haciendo cuesta arriba, por eso ha acudido a un especialista para llevarlo de la mejor manera posible como ha contado, añadiendo en esta entrevista: "Tengo ansiedad, tomo pastillas para dormir y estoy con una psicóloga". Tras su paso por 'GH VIP 7' y después por 'El tiempo de descuento', ha visto cómo su felicidad con Diego Matamoros ha desaparecido por completo. "Se reabrieron todas las heridas y acabamos recriminándonos mierdas", ha desvelado, hablando así también de la amistad tan fuerte que forjó con Kiko Jiménez, algo que propició más de una discusión. Pese a todo y llena de lágrimas, la modelo ha reconocido que continúa enamorada de Diego Matamoros, pero siente que la reconciliación es imposible: "Ahora sería imposible. Hay mucho rencor y juntos éramos una bomba de relojería". Pese a que volver a estar con él lo ve un poco lejano, puede que a largo plazo sí que vuelva a encauzar su matrimonio, por eso ha hecho una petición de cara al futuro: "Pido un poco de empatía".
Más allá de su matrimonio fracasado, ha hablado de su amistad con Kiko Jiménez, y parece que las cosas entre ellos no acabaron muy bien. Se siente decepcionada y no mantienen el contacto, además siente mucho pesar por haber destruido su matrimonio por hacer dado una oportunidad a su amistad con el asesor del amor de 'MYHYV'. "Me he sentido ridícula", ha querido añadir al respecto.
Muy dolida con los Matamoros
Y otra de las cosas que le ha ocasionado mucho dolor ha sido tener que lidiar con las palabras de Kiko Matamoros, diciendo que ha sentido un acoso y derribo desde que entró en el primer concurso. "No sabía que me odiara tanto, nunca he tenido relación con él. No me di cuenta de lo grave que era hasta que mi madre me dijo: 'En la vida me voy a sentar con ese señor'", y ha seguido diciendo sobre su familia política: "El apellido Matamoros me ha dado muchos disgustos, problemas y quebraderos de cabeza, he vivido cosas muy duras y difíciles durante el tiempo que he vivido con Diego. Temas legales duros".