17 de octubre de 2024 fue la fecha escogida por Ángel Cristo Junior y Ana Herminia para darse el 'sí, quiero'. Un jueves puede parecer un día raro para una boda, pero esto tenía una explicación: este sería el 80 cumpleaños de Ángel Cristo padre, fallecido el 4 de mayo de 2010 a los 65 años. Así, el que fuera concursante de 'Supervivientes 2024' quería hacerle un homenaje al hombre que le dio la vida en un momento en el que su relación con su madre, Bárbara Rey, está peor que nunca.
Ángel Cristo ha sido el encargado de volver a poner de actualidad lo que siempre fue uno secreto a voces, la relación de la vedette con el Rey Juan Carlos I cuando este todavía era Jefe del Estado y estaba casado -como todavía sigue- con la Reina Sofía. Primero fueron unas fotografías tomadas supuestamente por él el 22 de junio de 1994 en la que la entonces pareja se besa no dejando lugar a dudas de su relación.
Luego, la filtración de todos las grabaciones de conversaciones entre ambos en las que no solo se refieren el uno al otro como "mi amor" y "cariño" descubriendo una relación afectiva mucho mayor, sino que el Rey Juan Carlos habla de su matrimonio roto, el golpe de Estado del 23-F, el escenario político de los años 90 y hasta la propia Bárbara Rey reconoce que recibió 35 millones de pesetas del ahora Rey Emérito en calidad o no de chantaje por este mismo contenido.
Ante este panorama y con supuestas demandas en marcha por todo esto, Bárbara Rey y su fiel defensora pública su hija Sofía Cristo ni estaban ni se las esperaba en la gran boda del año -al menos para Mediaset-. ¿Pero dónde estaba y cómo estaba Bárbara Rey en un día tan señalado? Pues ella misma se ha encargado de mostrárselo al mundo a través de su cuenta de Instagram, canal dond acostumbra en pleno escándalo hacer comunicados y responder a lo que se dice de ella en los progrmas de televisión.
Lo hacía desde la misma Puerta del Sol de Madrid: "Aquí es donde se dan las Campanadas", explicaba a sus seguidores como si de una guía turística en pleno 'free tour' se tratase. Luego, ya con un dulce que presumiblemente se habría comprado en la famosa pastelería La Mallorquina ubicada en la plaza, la vedette seguía mostrando el lugar en el que se encontraba mientras la gente que pasaba por detrás no dejaba de mirarla al estar encontrándose con una de las mujeres más famosas del momento por el escándalo con el Rey Juan Carlos.
"No como esos pajarracos que aparecen por la tele"
Pero todavía hay más. Leticia Requejo, reportera de 'TardeAR', escribía a Bárbara Rey desde la entrada de la finca en la que se estaba casando su hijo Ángel Cristo para conocer en primera persona cómo se encontraba en estos momentos. Y esta fue la respuesta de la vedette: " Paso de todo esto y del mundo. Estoy en paz, no quiero saber absolutamente nada de la boda ", decía mostrándose tranquila a pesar de todo.
Por si todavía había alguna duda, la propia Bárbara Rey compartía también una fotografía con varias amigas mostrando al mundo lo bien rodeada que está en estos momentos: " Estas son mis verdaderas amigas, las que no me traicionan, como podéis ver, no como esos pajarracos que aparecen por la tele que no conozco de nada ", y añadía: " Yo no puedo ser amiga de gent atan fea que tiene esa maldad ".