Esperanza Aguirre se ha convertido en la gran protagonista de la tarde de este jueves 3 de abril después de cometer una infracción de tráfico en el centro de Madrid cuando la expresidenta se detuvo en el carril bus en la Gran Vía a la altura de la Plaza del Callado.
En una conversación telefónica mantenida con el canal 24 Horas, Aguirre ha comentado que, aprovechando que un taxi estaba detenido para dejar a unos viajeros, ella decidió parar un momento para sacar dinero del cajero automático.
En ese momento llegaron unos agentes de Movilidad, que le solicitaron tanto el carné de conducir como los papeles del coche, además de imponerle la correspondiente multa por la infracción cometida. " Me tuvieron retenida durante 20 minutos interrumpiendo el tráfico porque estaba mi coche pero también los seis agentes de Movilidad que habían aparecido ", explicó la dirigente de los populares madrileños.
La expresidenta de Madrid decidió entonces, tras pedir a los agentes -sin éxito- que le retirasen la denuncia, preguntarles si ya se podía marchar; pero antes de dejarla ir tenía que recoger la copia de la denuncia.Aguirre: "Ya que me habían puesto la multa y solo me quería ir de allí"
"Entonces le dije que no me hacía falta la copia, que no la necesitaba para nada, que me quería ir a mi casa". Ante las negativas de los agentes, Aguirre decidió arrancar su coche y marcharse, momento en el que golpeó una de las motos de los agentes, que cayó al suelo.
Tras este incidente, la política ha pedido perdón reconociendo que no actuó correctamente, pero asegurando al mismo tiempo que "la clave del asunto es que cuando el agente de Movilidad vio mi cara y mi carné de conducir, se le demudó el semblante porque no me debe tener simpatía y decidió que me iba a tener en la plaza del callao con las miles de personas que pasaban, rodeada de seis agentes de Movilidad, hasta a ver si me sacaban una foto ".