El medio El Español ya informó de que quiso torear haciendo una mini gira para despedirse, tanto en España como en otros países, pero terminó por no compensarle. "Alguna vez podrá ponerse delante de un toro, pero no será de forma profesional. Enrique se ha cortado la coleta. Quiere vivir y se ha dado cuenta lo efímera que es la vida", se dice desde el anterior medio, para añadir: "De momento, su decisión ha sido clara y ha dejado hasta de entrenar".
Al parecer, su entorno ya conoce sus intenciones, y la que más le apoya en este paso es Ana Soria, su chica. Por otro lado, ambos buscan nuevos horizontes profesionales, por eso han creado su primera sociedad inmobiliaria en común. Los do han creado la empresa Kranevitte's 22 el pasado 14 de enero de 2022.
Lo cierto es que parece que Ponce está siguiendo con ella los mismos pasos que dio con Paloma Cuevas, su exmujer, porque también crearon una sociedad con características similares. Se creó en 1997 y su objeto era la compra, venta y explotación de bienes inmuebles. Justo cuando el divorcio estaba a punto de darse a conocer, Cuevas dejó de figurar como apoderada solidaria de CPM Building a finales de abril de 2021.
Ahora el plan que la pareja tiene entre manos, más allá de los negocios, es el que tiene que ver con su futura boda, porque Enrique Ponce ha asegurado a la revista Diez Minutos lo siguiente: "Le voy a pedir matrimonio a Ana", así que su relación va viento en popa y demuestran estar muy enamorados. Desde El Español adelantan que la boda será en 2023 y será civil ya que é ya se casó por la iglesia. Asimismo, primero ella terminará la carrera que cursa de Derecho y lo celebrarán en Almería en la más estricta intimidad.
Una boda discreta e íntima
Una persona cerca a ambos ha dicho: "Que nadie espere una fiesta con famosos, caras conocidas y exclusiva en una revista porque se van a equivocar. Enrique y Ana harán algo íntimo, discreto. Otra cosa es que cedan algunas fotos a un medio amigo".