Ya han pasado 43 años desde que Isabel Preysler y Julio Iglesias dieron la bienvenida al mundo al más pequeño de sus tres hijos en común: Enrique Iglesias. Mucho ha llovido desde entonces y el madrileño ha crecido y madurado hasta convertirse en todo un hombre de éxito, conocido internacionalmente como uno de los cantantes latinos con mayor prestigio.
Ahora, el pequeño de los Iglesias-Preysler ha tenido su propia descendencia y disfruta de su recién adquirida paternidad. El 16 de diciembre de 2017, su pareja Anna Kournikova daba a luz a dos mellizos fruto de la relación que el cantante y la extenista mantienen desde el año 2001. Los bebés Nicholas y Lucy llegaron en el más absoluto silencio mediático, haciéndose eco la prensa de que la exdeportista estaba embarazada pocos días después de que se produjera el alumbramiento.
Este martes 8 de mayo, Enrique Iglesias celebra su 43 cumpleaños, el primero como padre. Inmerso en su gira mundial, al cantante le toca celebrarlo lejos de su casa, de su mujer y de sus hijos. Teniendo en cuenta el gran afecto que muestra a sus mellizos en las redes sociales, de seguro que le ha costado bastante separarse de ellos, pero como buen profesional que es, sus compromisos de agenda se han impuesto a la necesidad de estar cerca de los suyos. Con más de un tercio de siglo vivido, muchas son las historietas con las que el artista podrá entretener a sus retoños, relatándoles cuáles fueron sus inicios y cómo llegó hasta donde está hoy.
Primeros años
Lo cierto es que Enrique Iglesias ya era famoso incluso antes de nacer, pero no por méritos propios, sino por ser 'hijo de'. Sin embargo, desde bien pequeño ya sabía que quería dedicarse a la música, como su padre, y convertirse en un cantante de éxito solo gracias a su trabajo y esfuerzo, no a su apellido. Durante su adolescencia, pidió apoyo a su niñera, quien lo crió, para que le ayudara a hacer realidad su sueño. La cuidadora le prestó 500 dólares, con los que el madrileño grabó una maqueta que fue paseando de discográfica en discográfica.
Para evitar ser relacionado con su familia, Iglesias se presentaba a los directivos de los sellos con el nombre de Enrique Martínez, haciéndose pasar por guatemalteco. En 1994 consiguió su primer contrato con Fonovisa, una discográfica estadounidense que produce canciones en español. Al año siguiente, lanzó su primer single, 'Si tú te vas', que rápidamente alcanzó el puesto número 1 en las listas de música hispana. El sencillo se incluyó en su álbum debut, 'Enrique Iglesias', convirtiéndose en todo un éxito mundial, valiéndole al cantante su primer Grammy como mejor artista pop latino.
Cantante de éxito
A partir de aquel momento, Enrique Iglesias se consagró como un gran artista al que le auguraba un futuro bastante prometedor. Sin embargo, el cantante era consciente de que debería cantar en inglés si de verdad quería convertirse en una estrella a nivel internacional. 'Bailamos', su primera canción en la lengua de Shakespeare, alcanzó el primer puesto de la lista Billboard en Estados Unidos, introduciéndolo de lleno en el mercado anglosajón. Eminencias de la música como Bruce Springsteen y Whitney Houston colaboraron con él en su cuarto álbum de estudio, 'Enrique', y en en año 2000 actúo junto a Phil Collins, Christina Aguilera y Toni Braxton en el mundialmente famoso intermedio de la Superbowl.
Desde entonces, Iglesias también ha compartido escenario con artistas de la talla de Miley Cyrus, Justin Bieber, Céline Dion, Jennifer Lopez, Pitbull, Adam Levine, Usher o Kylie Minogue. Demostró también sus dotes interpretativas protagonizando un anuncio junto a Beyoncé, Brtiney Spears y Pink, e interviniendo de forma secundaria en la series 'Cómo conocí a vuestra madre' y 'Dos hombres y medio'. Sin embargo, como bien sabe el refranero español, ' en casa de herrero, cuchara de palo ', y parece que la carrera profesional de Iglesias está mucho más valorada en el extranjero que en el país que le vio nacer, llegando a pasar hasta doce años sin que diera ningún concierto en España. Por fortuna, en los últimos años la fama del cantante ha experimentado un 'boom' en España y gracias a éxitos como 'Bailando', 'Noche y de día' o 'Súbeme la radio', ya nadie duda del talento de Enrique Iglesias como músico.
Su relación con Kournikova
Pero además de todos sus logros profesionales, el artista también ha triunfado en lo que respecta a su vida personal. En 2001, durante la grabación del videoclip de uno de sus temas más sonados, 'Escape', Iglesias conoció a la por aquel entonces tenista Anna Kournikova, que protagonizaría el clip junto a él. En la cinta, los dos se besan apasionadamente y llegan a intimar en el asiento trasero de un coche. La conexión fue tal que acabó traspasando la ficción y cantante y deportista acabaron enamorándose perdidamente. Desde entonces han sido uña y carne y, aunque han pasado por sus más y por sus menos como cualquier otra pareja de a pie, han demostrado que se profesan un gran amor incondicional.
Desde que iniciaron su relación, Iglesias y Kournikova han sido muy recelosos con salvaguardar su vida privada, hablando lo menos posible sobre su amorío y evitando a toda costa a los medios sensacionalistas. De hecho, durante los 16 años de noviazgo que acumulan, han sido muy pocas las demostraciones de amor en público, guardándoselas probablemente para la intimidad de su hogar. Sin embargo, desde que nacieron sus bebés, la pareja se ha mostrado muy activa en sus respectivas redes sociales, y tanto ella como él comparten con frecuencia fotografías familiares en las que disfrutan de la compañía de sus pequeños mellizos.
Papá por sorpresa
Ya han pasado cuatro meses desde que Nicholas y Lucy se unieron a las vidas de Enrique Iglesias y Anna Kournikova. Los mellizos llegaron al mundo sorprendiendo a todos los medios, ya que nadie era consciente de que la rusa estaba embarazada. De hecho, haciendo gala del hermetismo que rodea a la pareja, los dos padres decidieron construir un muro de cinco metros de alto en su casa de Miami para que nadie pudiera fotografiar la tripita de Kournikova. Se entiende también que el deseo de proteger la intimidad de su novia fue lo que motivó a Iglesias a faltar a la boda de su hermana Ana Boyer, celebrada pocos días antes de que nacieran sus retoños. La mujer de Fernando Verdasco dijo en su día que entendía perfectamente los motivos por los que su hermano había faltado a su enlace, pero no quiso entrar en más detalles.
Pero desde que Lucy y Nicholas nacieron, los dos padres se han mostrado abiertamente entusiasmados y muy felices de haber aumentado en dos el número de miembros de su familia. En especial, el madrileño ha sorprendido a todo el mundo actualizando frecuentemente sus redes sociales con imágenes de sus hijos. A los seguidores del cantante se les caía la baba observando cómo se comía a besos a uno de sus retoños, o cuando lo sujetaba con una sola mano mientras el bebé sonreía.Estas publicaciones en las que el artista afirma estar "enamorado" de sus mellizos chocan mucho con las declaraciones que él mismo ofreció para una entrevista en Argentina. En aquel momento, cuando solo tenía 20 años, Iglesias se mostró reacio a la idea de tener hijos en el futuro, asegurando que lo único que quería era ser feliz y mantenerse en el mercado musical. "Nunca se sabe, pero yo creo que no", comentaba el madrileño, sin ser consciente de las vueltas que da la vida y de que más de dos décadas después, el destino le regalaría a las dos personitas que más quiere en el mundo :
Por otra parte, Kournikova sí que confesó en 2011 su deseo de convertirse en madre junto a su novio, negando que la celebración de una boda fuera algo prioritario para ella. Sus deseos se han hecho realidad y la pareja y sus dos mellizos forman una familia de cuatro muy entrañable y unida. Inmerso en su gira, que comenzó el 7 de mayo, a Iglesias le toca pasar su primer cumpleaños como padre alejado de los pequeños Nicholas y Lucy. No será hasta el 27 de octubre cuando el cantante acabe su recorrido por el mundo, parando por última vez en Reino Unido. En cualquier caso, seguro que buscará un hueco libre en su apretada agenda para regresar cuanto antes a Miami y pasar un poco de tiempo con sus hijos, evitando así evocar en ellos su propia infancia, en la que su padre Julio Iglesias se perdió muchos momentos debido a su carrera musical.