Enrique Iglesias fue pillado el pasado mes de mayo en una céntrica autopista de Miami conduciendo con velocidad excesiva y con el carnet de conducir caducado, e intentó además ocultarlo a la policía, por lo que fue detenido por los agentes de tráfico del condado.
El incidente comenzó cuando el cantante, acompañado por su representante Abel Tabuyo, circulaba por una de las vías rápidas de la interestatal 95, que en ese momento se encontraba cerrada y no cedió el paso a una ambulancia que se aproximó con las luces de emergencia encendidas.
Tras el acto, los agentes de la Patrulla de Caminos le ordenaron detenerse, por lo que el hijo de Isabel Preysler y Julio Iglesias detuvo el vehículo y saltó hacia la parte trasera del coche, intentando ocultar que era él quien conducía, mientras Tabuyo ocupó el asiento del conductor.
Tenía el carnet suspendido desde hace seis meses
Este hecho fue percibido por los agentes, quien rápidamente descubrieron que el objetivo del cantante era ocultar que conducía sin licencia, debido a que se encontraba suspendida desde hace medio año, un delito menor en el estado de Florida.
Tanto el cantante como su representante fueron esposados, y se abstuvieron de prestar declaración. No obstante, fueron acusados de obstrucción a la justicia sin violencia, e Iglesias se enfrenta a cargos por conducir con una licencia suspendida. El artista se enfrenta a 60 días de cárcel o una multa de 500 dólares.