El cantante no atraviesa una buena etapa tras su ruptura, que le está pasando factura a nivel anímico.
David Bustamante vive uno de los momentos más delicados de su vida a causa de su separación de Paula Echevarría. Por el momento, ella vive en el domicilio conyugal, un chalé situado en Villafranca del Castillo en el que sigue residiendo también la hija de ambos Daniella.
Tras pasar la Semana Santa cada uno por su lado junto a su niña, él en San Vicente de la Barquera y ella en Candás, tocó regresar a Madrid. Hacía días que el cantante no había visto a su hija, así que cogió el coche y se presentó en su casa para ver a su pequeña, llegando a la vivienda hacia las 19:00 horas.La visita se prolongó durante una hora, tiempo en el que el intérprete de 'Dos hombres y un destino' estaría jugando con Daniella y quizás hablando con Paula Echevarría, intentando buscar una reconciliación o tocar temas relacionados con su hija, como por ejemplo su Comunión.
David Bustamante está sereno, pero empieza a cabrearse con el acoso de la prensa, que hace guardia en el domicilio conyugal y que les sigue a todas horas. A su salida de la vivienda mostró su enfado, aunque por ahora solo le queda resignarse.El cabreo de Gervasio Bustamante
Quien también se cabreó fue Gervasio Bustamante, padre de David, que también está sufriendo los estragos de convertirse en objeto de deseo de los medios de comunicación pese a que la historia le pilla de lado.
"¿Qué queréis sacarme fotografías para criticarme después de cómo voy vestido únicamente? Es que no lo entiendo, de verdad", comentó el señor muy molesto al ver que le hacían fotos. En respuesta a cómo estaba su hijo, esta fue su contestación: "¿Cómo va a estar? Bien, ¡preguntádselo cuando le veáis!".