La actriz ha confirmado que tiene pensado casarse muy pronto con Gonzalo Sierra, el padre de su hijo Noah.
Elena Furiase no puede estar más feliz después de haber hecho saber que tiene pensado casarse en el verano de 2021. Así se lo ha comunicado a la revista ¡Hola!, a la que le ha dicho: "Es cierto, y tanto Gonzalo como yo, como nuestras respectivas familias, estamos muy felices". Desde que Gonzalo Sierra llego a su vida ha cambiado por completo y fue en octubre de 2018 cuando se convirtieron en padres de su primer hijo, Noah.
Por otro lado, y aunque no se conocen muchos detalles de esta boda, todo parece indicar que no se celebrará en Madrid, sino en una ubicación muy distinta. Fue en diciembre de 2019 cuando dedico a su chico unas palabras muy especiales con motivo de su segundo aniversario, diciendo: "Gracias por darme tanto de ti... @gonzalo.g ¡Qué suerte la mía! #miamor". En estos momentos la actriz está disfrutando al máximo de la maternidad y para que su hijo se convierte en el perfecto niño de las arras. Unos días atrás de que Elena Furiase lo confirmará, ya la revista Semana habló de las intenciones que tenía la pareja de pasar por el alta, momento en el que la madre de la actriz, Lolita Flores, lo desmintió: "Si es verdad, me molestaría mucho que yo no me haya enterado".
Y una vez más la madre de la futura novia ha sido preguntada sobre esta buena nueva, a lo que ha respondido: "No me digas, pues ya sabéis más que yo", y cómo sería sin creérselo ha dicho que iba a llamar a su hija para ver si lo podía confirmar: "Me parece a mí que no es cierto. No sé nada todavía. Me dais un sorpresón. Encantada de la vida de que se case, pero me gustaría que me lo dijera a mí". Muy emocionada con la noticia
Sería toda una sorpresa que Elena Furiase no se lo hubiese comunicado a su madre en persona o de manera íntima teniendo en cuenta la buena relación que tienen, es más, la crisis sanitaria ha hecho que Lolita Flores le escribiera una carta muy emotiva y especial. Eran este escrito en el que reflexionaba sobre todo el tiempo en el que había estado separada de sus seres queridos, entre ellos su nieto: "Estoy aguantando como puedo no verle, no olerle, no besarle, el tirarme al suelo con él y jugar a que yo también soy una niña. Su abuela, que lo quiere con locura".