La influencer ha utilizado sus redes sociales para compartir con sus seguidores numerosas situaciones de acoso.
Dulceida y su mujer, Alba Paul Ferrer, han viajado hasta Hawaii por motivos laborales, y durante el viaje aprovecharon para grabar varios vídeos que encantan a todos sus fans. A pesar de que la pareja ha disfrutado como nunca del lugar, la influencer se ha visto obligada a denunciar una serie de terribles situaciones que les ha tocado vivir.Ha sido a través de sus Stories de Instagram donde ha querido compartir con todos sus seguidores los intolerables momentos de acoso que ha tenido que soportar durante su viaje. "Estoy harta. Ayer fuimos cuatro amigas a la playa a ver las estrellas, y cuando nos estábamos marchando se acercó un chico, nos pregunto de dónde éramos y cuando nos fuimos me cogió del brazo y me dijo: 'Tú estás muy bonita'. Me solté rapidísimo y sentí miedo e impotencia", relataba una de sus stories.
Pero la cosa no quedó ahí, y Aída Domenech ha continuado relatando más momentos que ha tenido que vivir: "Esta tarde, Alba y yo nos hemos vestido de hawaianas para grabar en la playa y un señor nos ha seguido", decía otro de los stories, "y ahora mismo hemos ido a comprar y ha entrado un chico, nos ha perseguido por el supermercado, y cuando pagaba se ha acercado a mí diciendo cosas que no he entendido. Me ha dado un beso en la mejilla y se ha ido corriendo". Reflexión sobre la grave situación
Después de relatar las fatídicas situaciones que ha experimentado durante su viaje, Dulceida ha aprovechado para compartir una reflexión en favor de las mujeres y en contra del acoso. "Si al ver a una mujer por la calle te sientes con el derecho de acosarla, háztelo mirar", decía, "necesitaba decir esto porque estoy cansada de sentirme incómoda, sentir miedo y que esto pase continuamente. Insultar o acosar a una mujer no es gracioso", finalizaba en su discurso.