Dulce Delapiedra ha sido una de las personas que, a golpe de exclusiva, ha querido pronunciarse sobre la guerra abierta entre Isabel Pantoja y Kiko Rivera. Lo ha hecho a través de una entrevista en la revista Lecturas, donde ha hablado sin pelos en la lengua cómo fue ser trabajadora de la tonadillera.
Ha sido en estas palabras donde ha contado algunos entresijos de la polémica Cantora, el lugar que esconde más secretos de los imaginados. Entre tanto, la que fue niñera de Isa Pantoja, ha querido hacer referencia a diversas situaciones a las que tuvo que enfrentarse cuando vivió en la casa de Isabel Pantoja, como ver el despilfarro económico que hacía o como los desengaños hundieron por completo a la cantante.
"Pantoja me dijo que me guardaba un piso pero lo vendió", ha revelado entre sus palabras. Delapiedra pasó de ser fan de Pantoja a ser su empleada, quien le ofreció irse con ella a Cantora para que fuera niñera de su hijo, que tenía tan solo un año. Empezó cobrando 30.000 pesetas (unos 180 euros) en Cantora y acabó cobrando 600 euros. "Siempre estaba en números rojos", revela a la revista de su precaria situación económica.
Y con la llegada de Isa Pantoja, también ejerció de su niñera, a la que cogió un enorme cariño. Estuvo 25 años al servicio del clan Pantoja, hasta que en 2014 fue la cantante la que la despidió. Pese a todo, ha sido un apoyo muy importante para Isa Pantoja, a quien ayudó los primeros años de la vida de su hijo.
No siente cariño por Kiko Rivera
No se sabe exactamente qué ocurrió para que la cantante decidiera prescindir por completo de ella, algo que creía que sería para siempre como ha contado: "Isabel dormía de día y comía poco. Si le apetecía a las tres de la mañana, pedía un solomillo, un café... Sus manos y sus pies era yo, quería que fuera para toda la vida y envejecer conmigo". Y pese a que en más de una ocasión ha hecho saber q ue hacia Kiko Rivera no tiene ningún tipo de cariño, sí ha dicho que le apenó cuando salió a la luz todo lo referente a la herencia de su padre.